Al fin, lo he conseguido, estás leyendo esta carta, la que he escrito para que sepas que vas a morir y como va a ser tu muerte.
¿Piensas que esto lo está leyendo todo el mundo? ¿Seguro?
No, no es así.
¿Has observado el código que hay al principio?, es el código que ha generado el programa que te instalé la última vez que fui a visitarte, un programa que suplanta el texto original del hilo por este.
¿Crees que miento?, no lo hago, tú sabes que sé lo suficiente de informática para hacerlo, además, en internet se encuentran hoy en día bastantes formas de hacerlo, pero no era eso lo que quería contarte, sino como vas a morir.
¿Recuerdas cuando perdiste tus llaves unas horas?, era yo, que te las quité para hacer una copia para poder acceder a tu casa libremente, como así he hecho en infinidad de ocasiones cuando no había nadie en ella.
Si, llevo bastante tiempo planeando esto, y ahora he decidido llevarlo a efecto, es la hora, se te acaba el tiempo.
Me gusta andar por tu habitación, se que es tu refugio, donde pasas tus mejores momentos, por eso la he visitado.
¿No has echado nada de menos en ella?, siento habérmelo llevado, pero quiero tener un recuerdo de lo que voy a hacer, el otro será tu vida.
¿No has visto algo fuera de lugar en tu habitación?, lo he dejado a propósito, y sé que ahora te vas a dar cuenta de ello y vas a saber quien soy.
Puedes pensar que todo el mundo está leyendo lo mismo, que es una historia más de las que se publican en "literatura", pero no es así, créeme.
El programa que te instalé, está preparado para leer un código java que he insertado en la historia original que he publicado.
Cuando el programa ha leído el código, ha sustituido la página que muestra el navegador por esta otra que estaba almacenada en tu PC.
Así mismo, el programa me ha enviado un código vía internet diciéndome que has comenzado a leer la carta que estás leyendo, y que yo he recibido en mi PDA.
¿Qué porqué tú?, por qué te lo mereces, tanta soberbia, tanta prepotencia, tanto desprecio, debe de terminar, no soy yo el único que lo sufre, somos más, pero nadie se atrevía a darte una lección, sólo yo me atreveré.
¿Por qué yo?, por qué siempre he deseado saber que se siente al matar, al deslizar el afilado filo de un cuchillo por tu suave piel, por sentir la calidez de tu sangre en mis manos, por ver el terror reflejado en tus ojos.
Seguro que estás pensando que esto no va contigo, que esto es una historia más, te equivocas, es real, ¿o acaso no sentiste anoche una extraña sensación en tu cara?, era el filo del cuchillo deslizándose suavemente, pero aún no te podía matar, no habías leído esto.
Te contaré como será tu muerte.
Esperaré, mientras lees, detrás de ti, aguardando a que te gires, pues no te atacaré por la espalda, ya te he dicho que quiero ver reflejado en tus ojos el terror a la muerte, y, además, quiero que sepas quien soy yo, que veas y recuerdes todo lo que nos has hecho, que sepas por qué tienes que morir.
El cuchillo se paseará por tu cuello, ligero, casi como una pluma, dejando una ligera línea roja marcada, por la que, casi al instante, comenzará a brotar sangre, TU SANGRE.
El mismo miedo que te ha atenazado las cuerdas vocales y te ha impedido gritar, ahora te ordenará lanzar el grito más fuerte de tu, ya escasa, vida, pero no podrás, sólo saldrá de tu boca un gorgoreo, como cuando haces gárgaras, porque te habré seccionado la traquea y, con ello, las cuerdas vocales serán inútiles.
Intentarás levantarte, pero yo te lo impediré, tus manos y pies estarán inmovilizados por mí, sin cintas, sin cuerdas, sólo con mi cuerpo, y por mucho que lo intentes, no podrás dar a conocer tu situación a nadie.
Además, a mi me conviene que luches, que intentes escapar, así tu vida se escapará más rápidamente, lanzando más adrenalina a tu torrente sanguíneo, haciendo que el corazón lata más rápido y tu sangre salga aceleradamente de tu herida.
Cuando hallas muerto, contemplaré mi obra, y borraré las pocas huellas que he dejado, sólo cerraré la página del navegador y el programa se destruirá, borrando todo rastro de esta carta y de tu visita al foro.
Se que la policía hallará huellas mías, pero tengo coartada, muy buena, no depende de nadie, sólo de mi PC, ahora mismo se haya navegando por internet de forma automática mediante un robot, dejándome unas horas preciosas para acabar el plan.
Bueno, ya lo sabes, ya está todo dicho, estás viviendo tus últimos minutos sobre la faz de la tierra, que pena, no podrás despedirte de nadie, aunque dudo mucho que alguien te importe lo suficiente como para despedirte.
Por como escaparé, no te preocupes, lo mismo que hice para entrar y pasar la noche aquí a tu lado, me servirá para salir, silencioso, sin llamar la atención.
Además, tú siempre lo has dicho y te has sorprendido, lo capaz que soy de deslizarme casi sin hacer ruido y sorprender a la gente, y eso que no había que matar a nadie, ahora lo seré más, está en juego TU VIDA.
Ahora estás pensando que es un relato mediocre, casi del montón, y que ha conseguido atraer tu atención un momento, pero, ¿es así?
¿Qué ha sido ese leve ruido?, ¿lo has oído?, ¿ha sido el viento?, ¿o he sido yo que he salido de mi refugio y me he colocado a tu espalda?
¿No has visto ese leve movimiento que ha ocurrido en la periferia de tu campo visual?, ¿has sentido ese leve cosquilleo en la nuca?, ¿no estás oyendo ese sibilante sonido que es mi respiración?
Estoy detrás tuya, con mi arma preparada, esperando a que te des la vuelta, eso te salvará, mientras no te vuelvas so te haré nada, aunque tarde o temprano lo harás, y cuando lo hagas, te encontrarás frente a mi, y comprenderás que soy el enviado de la parca que ha venido a hacer su trabajo.
Esto es lo último que vas a leer, ¿a que esperas para darte la vuelta y encontrarte con tu destino?...
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