Venden bien y aún así decidieron amenazar a gente que se lo había bajado de forma ilegal, demandando cifras desorbitadas o la imposición de medidas legales. Por fortuna se retractaron de sus prácticas, pero este es un ejemplo más de cómo se suelen llenar la boca del típico "la piratería nos está arruinando" hasta que se ahogan en su propia mierda, pues la mayor parte de las veces es pura verborrea que intenta ocultar un hecho evidente: se venden juegos a porrillos, y eso teniendo en cuenta la crisis. Lo que no podemos pedir es que la gente compre más de lo que puede comprar. Pero bueno, el capitalismo funciona de este modo.