carlosniper escribió:A ver está claro que llegaron pero ni de coña volvieron. Cogieron a los astronautas que conoce todo el mundo, y grabaron en un estudio junto con Stanley kubrick lo que se vio por la tele. Realmente mandaron a otros astronautas que llegaron a la luna, pero que tristemente murieron. Pero USA no podía permitir ese 'fracaso' (entre comillas porque llegaron a la luna)
Salu2
Volver de la Luna es menos complicado que ir allí, porque para despegar de la Luna llega con un pequeño motorcito (la fase de ascenso del Módulo Lunar) mientras que para despegar de la Tierra hace falta nada menos que el cohete más grande del mundo, el Saturno V.
El regreso de la Luna consistía en: 1º) despegar de la Luna con el Módulo Lunar; 2º) unirse al módulo de comando en órbita que se encontraba aún junto a la unidad de servicio; y 3º) deshacerse del módulo lunar lanzándolo contra la Luna, y poner rumbo con el módulo de comando para la Tierra.
Es un viaje bastante largo (3 días) pero no hay nada en esa zona, de hecho está bastante oscuro, y puedes ir de la Luna a la Tierra con un par de correcciones de rumbo. Te invito a hacer el viaje en un simulador como ORBITER (gratuito) que da una idea bastante realista de la oscuridad que hay desde que estás a unos 50.000km de la Tierra.
La dificultad más grande es entrar en el ángulo correcto, en la atmósfera terrestre, primero para no salir rebotado hacia fuera, y segundo para no chamuscar la nave. Y esto se consiguió gracias al ordenador de a bordo del módulo de comando, que enviaba telemetría constantemente al centro de seguimiento de Houston.
Además por aquel entonces no había alrededor de la Tierra miles de objetos de basura espacial como sí hay hoy.
En cuanto a lo que dice
@SECHI tengo entendido que todas las fotos de la Tierra son manipulaciones fotográficas. Es decir: si estuviésemos en el espacio no veríamos nunca la Tierra completamente iluminada. Veríamos el planeta en gran parte, dentro de una gran penumbra. Muy lejos de esa bonita imagen de la canica azul. Entonces lo que se hizo fue presentar la imagen de la Tierra como pensaron que la gente querría verla, pero es una manipulación fotográfica.
En el simulador ORBITER puedes elegir una misión del transbordador espacial y verás por ti mismo que la Tierra no está "iluminada" con esos colores tan vivos desde el espacio.
@Tony Skyrunner si no has visto el programa "Mirlo Rojo" de J.J. Benítez ya tardas en verlo, dice cosas aparentemente absurdas, pero en la línea de lo que comentas.
En mi opinión, creo que lo que pudiera haber en la Luna, son ruinas y escombros, del mismo modo que en Marte. Comunicar públicamente la existencia de ruinas de edificios colosales, puentes, grandes cúpulas, si ello fuese así, causaría sin duda un gran revuelo y es por ello que se mantendría en secreto. Ninguna nación de las que ha llegado a la Luna o ha enviado sondas (EE.UU, Unión Soviética, Japón, China) ha revelado nada.
Hay que ponerse en su piel. Si fueras el presidente de EE.UU ¿comunicarías a tus conciudadanos que en la Luna hay ruinas que se pueden datar miles o millones de años antes del inicio de la existencia del hombre en la Tierra tal y como la conocemos hoy? Ningún presidente va a aceptar esa carga.
Volviendo a la cuestión esencial del hilo: sí se fue a la Luna, y las personas que fueron allí habían tenido un entrenamiento extraordinario, y también tenían unas virtudes y características personales fuera de lo normal. De no haber sido Buzz Aldrin tan optimista, de no haber tenido Neil Armstrong esa sangre fría y pericia legendaria, nunca habrían podido regresar de la Luna, porque llegar fue extremadamente dificultoso, incluso con todo el apoyo y el entrenamiento que tenían, ya que a última hora falló el ordenador, y hubo que hacer un alunizaje manual. Luego se supo que el fallo había sido de "hardware", no de software, y se corrigió en los ordenadores de las siguientes misiones Apolo.
Y una cosa que no se suele recordar es que el astronauta de mayor graduación militar que fue en la misión Apolo XI era Michael Collins, y le asignaron el papel secundario, pero absolutamente vital, de permanecer en órbita en el módulo de comando. Collins tuvo que sobreponerse a los pensamientos de que podría tener que regresar él solo a la Tierra abandonando a sus compañeros en la superficie del planeta.