“Quítame el pan si quieres
quítame el aire, pero
no me quites tu risa”.
Eso decía éste poeta con garbo,
que fue Pablo Neruda.
Yo pienso como el...
Y por eso, pedí prestados sus versos.
Versos que llegan a mi alma,
como un pedazo de pan
a los hambrientos.
Versos que llegan a mi,
como una rosa blanca,
traída por el viento.
Como una estrella,
que ilumina nuestro cielo.
Como una golondrina
perdida en la inmensidad
de nuestro suelo.
No me quites tu risa,
porque es mi sueño.
De que vivo,
que sueño,
si no tengo tu risa.
Y tu poeta
que bien terminaste tu poema,
yo no he podido,
la emoción, se apodera,
me encierra, y no me salen las palabras,
para terminar éste poema.
Y vuelvo a ti poeta .
Y me animo y copio.
Y son tus palabras
las que terminarán con mi poema.
“Cuando vuelven mis pasos,
Niégame el pan ,el aire,
la luz ,la primavera,
pero tu risa nunca
porque me moriría”.
