El uso de un TV es distinto a un smartphone, PC, etc. En un smartphone o PC podemos quedarnos mucho tiempo viendo imágenes fijas con elevados niveles de blanco y mucho brillo y contraste que pueden dañar los ojos. En un TV siempre estamos viendo imágenes en movimiento con poco nivel de blanco y nunca mantenemos la vista fija en la pantalla. Por esta razón las TV no llevan filtros para los ojos, aunque si esto te preocupa siempre puedes modificar la temperatura de color en ajustes de imagen.