Twitter ha anunciado haber empezado a probar el envío de tuits con 280 caracteres, el doble de los 140 que hasta ahora tenía como límite. El objetivo de la red social es que los usuarios puedan expresarse mejor y se liberen del reto que en ocasiones supone comprimir en exceso sus pensamientos. Por el momento esta posibilidad está disponible para un grupo reducido de usuarios antes de tomar la decisión de lanzarlo a todo el mundo.
“Nuestras investigaciones nos demuestran que el límite de caracteres es la principal causa de frustración para aquellos que tuitean en inglés, mientras que no lo es para los que hacen en japonés”, dice Twitter en su
blog oficial. “Además, en aquellos países en los que la gente no tiene que comprimir sus pensamientos en 140 caracteres y de hecho tiene caracteres de sobra, vemos que la gente tuitea más, ¡lo que es fantástico!”
Alrededor del 9% de todos los tuits escritos en inglés ocupan exactamente 140 caracteres. Difícilmente se trata de una coincidencia, lo que sugiere que los usuarios frecuentemente tienen que editar su escrito inicial para que quede por debajo del límite. Ahora, Twitter espera liberar a los usuarios de esta carga con la duplicación de caracteres en todos idiomas que se vean afectados por "la necesidad de comprimir ideas", que según la red social son la mayoría a excepción del japonés, el chino y el coreano.
La justificación para excluir estas lenguas es que sus usuarios usan menos caracteres dada la naturaleza de su lenguaje escrito. La longitud media de un tuit en japonés tiene 15 caracteres y solo el 0,9% de los tuits escritos en este idioma llega al límite de 140 caracteres. En cualquier caso, desde la compañía no se descarta que los idiomas asiáticos mencionados terminen recibiendo el mismo trato.
Originalmente, el límite de 140 caracteres se estableció para reflejar la longitud de los mensajes SMS, método que se utilizaba para enviar los tuits antes de que llegaran las aplicaciones para móviles. Los mensajes SMS están limitados a 160 caracteres, pero Twitter se reservaba los 20 restantes para incluir el nombre de usuario. Una restricción que en ocasiones ha dado alas a la creatividad.
“Entendemos que como muchos de vosotros habéis estado tuiteando durante años puede que sintáis un apego emocional a los 140 caracteres - a nosotros también nos ha pasado”, declaran desde Twitter. “Pero lo hemos probado, hemos visto la potencia de lo que puede suponer, y nos hemos enamorado de esta nueva, y todavía breve, restricción”.
Fuente: The Verge