Que los bots son un grave problema para Twitter es una de esas verdades que no necesitan mayor explicación. Millones de perfiles falsos creados con todo tipo de fines engrosan las cifras de tráfico de la red social, hasta el punto de distorsionar gravemente sus propias cifras oficiales. En principio Twitter mostró una cierta pasividad ante este problema que solo ha comenzado a atajar recientemente. Y la purga está siendo de tal tamaño que amenaza su propio crecimiento.
Según ha podido confirmar el
Washington Post, Twitter ha eliminado más de 70 millones de cuentas entre mayo y junio. Esta poda de perfiles espurios sigue en activo a buen ritmo.
En total, Twitter ha estado eliminando más de un millón de cuentas cada día. Esto supone duplicar con creces el número de perfiles borrados desde el mes de octubre, cuando Twitter tomó cartas en el asunto a raíz de las presiones del congreso de los Estados Unidos tras el reconocimiento del uso de redes de bots rusos para promover la candidatura presidencial de Donald Trump.
Dicho esto, no todos los bots son políticos. Compañías de todo el mundo utilizan redes de perfiles falsos para promover productos, engordar falsamente las listas de seguidores de personajes públicos. Es un negocio potencialmente jugoso para las agencias especializadas en este tipo de servicios, que frecuentemente trabajan para clientes en el extranjero.
El problema para Twitter es que la compañía aseguraba hasta hace poco que menos del 5 % de sus usuarios activos (estimados en 336 millones durante el primer trimestre de 2018) eran bots. Dado el tamaño de la última limpieza, sus cifras amenazan la reputación de la compañía entre los anunciantes legítimos, cuyas campañas son valoradas en función de métricas muy precisas.
Twitter, en su defensa, señala que la actual purga "no ha tenido un enorme impacto" en sus cifras de usuarios activos, puesto que muchas de las cuentas falsas eliminadas no tuiteaban con frecuencia. No es algo que haya tranquilizado a sus inversores. Las acciones de la compañía cayeron un 9 % inmediatamente después de que la bolsa abriera este pasado lunes (la información del Washington Post se publicó a última hora del viernes), y aunque su valor se ha recuperado parcialmente desde entonces, mantiene una caída con respecto a días anteriores que supone un freno importante al alza registrada durante los últimos meses.
Según señala la cadena estadounidense
NBC, el temor actual es cómo podrían afectar este mayor control a las acciones de Twitter a más largo plazo. Twitter ha logrado obtener sus cifras de crecimiento actuales gracias a unas restricciones más bien laxas con respecto a este tipo de prácticas, especialmente si se considera que el crecimiento de la red social ha bajado año a año del 14 % al 10 %. Es algo reconocido públicamente por Twitter, que ya en abril advirtió a sus accionistas de que la eliminación de las cuentas dedicadas al spam podría afectar a los datos de usuarios activos.
Las cifras de usuarios activos que Twitter proporcione con motivo del segundo trimestre serán sin duda analizadas con lupa para determinar el impacto real de los bots y sus purgas. Que siguen a buen ritmo, puesto que ni las entidades que los utilizan dejan de crear cuentas falsas ni Twitter ha terminado de purgar los millones que actualmente se encuentran bajo proceso de análisis.
Fuente: The Washington Post