Un bebé con cardiopatía muere en la Isla tras anularse el traslado a Madrid
El paciente debía ser intervenido en el Hospital de La Paz la semana pasada, pero el SCS suspendió el viaje en avión por "inclemencias del tiempo"
14.03.2013 | 01:19
MIGUEL ÁNGEL AUTERO
SANTA CRUZ DE TENERIFE Una niña de tres años de edad que estaba hospitalizada por una cardiopatía congénita en el Hospital Universitario de Nuestra Señora de la Candelaria falleció el pasado martes en este centro, diez días después de que se hubiera suspendido su traslado al Hospital de La Paz en Madrid, donde debía ser intervenida quirúrgicamente de su afección. La Consejería de Sanidad ha confirmado el fallecimiento de un menor en el Hospital de La Candelaria pero afirma que no puede ofrecer ningún tipo de detalle más porque "así lo prohibe la Ley de Protección de Datos".
Ha sido la Asociación Corazón y Vida de Tenerife la que ayer informó sobre el fallecimiento de la niña y su presidenta, Dolores García, señaló que "la paciente debió de haber sido trasladada al hospital de referencia en Madrid hace más de una semana". Sin embargo, desde esta asociación, formada por madres y padres de niños que padecen cardiopatía congénita, se pusieron en contacto con el citado hospital madrileño cuyos responsables transmitieron a la asociación que esperaban el traslado de la menor de Tenerife, pero el Servicio Canario de Salud les había comunicado que se suspendía el traslado de la paciente debido a las inclemencias del tiempo y la borrasca que debía de atravesar en vuelo hacia la capital del país.
Siempre según la versión de la Asociación Corazón y Vida, el vuelo del avión que debía trasladarla hasta el complejo hospitalario de la capital de España se había programado para el miércoles de la semana pasada, "pero no se hizo el traslado aduciendo a razones climatológicas".
Dolores García afirmó ayer que representantes de esta asociación y diferentes médicos de los hospitales de La Candelaria, del Hospital Universitario de Canarias, el Doctor Negrín y el Materno Infantil mantuvieron una reunión con la consejera de Sanidad, Brígida Mendoza, y otros altos cargos de este departamento del Gobierno autónomo, "y se trató en concreto el caso de esta niña llegándose a ofrecer la posibilidad de que fuera intervenida quirúrgicamente en el Materno Infantil de Gran Canaria, como apuntó Gabriele Iacona, coordinador de la Unidad de Cirugía Cardíaca" de este complejo hospitalario.
Esta portavoz señala que "desconoce" si la afección de la niña "se complicó" en los diez días que han transcurrido desde que se había programado su traslado a Madrid pero quedó suspendido hasta la fecha, ya que su cardiopatía era "tratable".
La Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias indicó ayer que "son los médicos los que valoran cada situación y los riesgos que conlleva cada caso antes de hacer un traslado" y añade que "la decisión siempre se produce por razones médicas y cuando las constantes vitales del paciente son estables".
El departamento regional de Sanidad no quiso pronunciarse sobre el caso de esta niña de tres años fallecida en el Hospital de La Candelaria, pero señaló que en el traslado de cualquier paciente se tiene en cuenta siempre si su estado de salud es estable, de tal forma que la evacuación no ponga en riesgo su vida. En el caso de que el traslado sea por avión, además, se tienen en cuenta las previsiones meteorológicas, ya que puede que un paciente resista un vuelo tranquilo pero no si se producen turbulencias.
Sanidad vincula siempre los traslados a que el paciente esté estable y a que las limitaciones propias de su enfermedad y necesidad de atención y recursos médicos lo permitan.
Respecto al posible traslado de la paciente al Hospital Materno Infantil de Gran Canaria, las fuentes de Sanidad se limitaron a señalaron que el Gobierno de Canarias mantiene un modelo de atención para el Servicio de Cirugía Cardíaca Infantil con la Fundación San Donato. En base a este modelo, continúan las fuentes, "a primeros de cada mes, un equipo de especialistas se traslada a Gran Canaria para intervenir a niños en operaciones que están programadas, y esta programación se lleva a cabo cuando el cuadro médico de un paciente reúne todos los parámetros para poderlo operar", explican.
Respecto a las urgencias que se puedan dar, la Consejería señala que "dependiendo de la complejidad de la urgencia", los pacientes se trasladan bien al Hospital Materno Infantil o a la Península", pero para hacer un traslado "hay que atender a dos cuestiones: que la persona esté estabilizada y que la meteorología lo permita". Sanidad recuerda que la decisión de un traslado depende siempre de razones médicas y son los médicos quienes en función del riesgo y la salud del paciente, los que deciden si se recomienda el traslado de un enfermo o no. A pesar de que la Consejería no quiso hablar sobre el caso de esta niña en particular, de forma velada, considera que si no se llevó a cabo el traslado de la menor es porque los médicos lo desaconsejaron.