Buenas, pues ahi tenéis el tercer capitulo de mi relato. En esta ocasion creo que SI que se me ha ido mucho la olla, pero espero que las piezas vayan encajando poco a poco... Si teneis alguna duda o creeis que esta algo mal decidmelo ^^
Para colmo en este capitulo intento explicar una de las cosas mas sencillas (el concepto es muy simple), pero que me parece bastante dificil de describir... espero haberlo conseguido.
Y por cierto, espero críticas, que me gustaría ir mejorando el relato y sin vuestras opiniones no creo que sea capaz, que para algo aqui hay mas de un lector empedernido
PD: Las personalidades de los personajes al hablar parecen la misma... intentaré currarmelo más más adelante... a ver si veo más mundo XD
____________________________________________________
CAPITULO III
EL MUNDO FÍSICO
A la mañana siguiente me levanté nada más sonar el despertador; después de apagarlo tuve una fuerte tentativa de disfrutar de cinco minutos mas de almohada, pero este "inocente y breve sueño" ya me la había jugado varias veces en años anteriores, con lo que preferí no arriesgarme. Me duché, me vestí, desayuné y preparé las cosas para ir al instituto. Solo pensar que tendría que repetir este aburrido rito todos los días en los que hubiese clase durante un año más me producía una indescriptible pereza, pero supongo que no había otra alternativa más que la de madrugar y asistir a clase.
El camino de ida al instituto también consistió en rutina pura y dura. Me encontré con Redmo y caminamos hacia el instituto mientras teníamos una conversación ligera, ya que he de admitir que aun duchándome mi atención era más bien reducida por las mañanas.
Las clases transcurrieron con normalidad hasta que llego la hora de Psicobiotecnología. Era Viernes, y tuvimos (o tuve) la suerte de que la ultima clase de ese día era precisamente Psicobiotecnología. Quizá el horario no era el más apropiado para una asignatura tan densa, si tenemos en cuenta que los pensamientos de los alumnos andaban ya a en esos momentos dispersos por el fin de semana, pero en mi caso el interés por dicha clase se sobreponía a las ganas de salir de aquella cárcel que era el instituto...
A los diez minutos de marcharse el anterior de profesor la puerta se abrió y entró Taido con su particular parsimonia. Esperó unos segundos a que la gente se callase y comenzó la clase:
- Buenos días... o casi mejor buenas tardes teniendo en cuenta la hora que es... Bueno, supongo que recordareis que el nombre del entremés que os di el primer día fue el de "Cuerpo y alma" y que el primer tema lo titulé "La mente"; pues bien, el título del tema que daré hoy es "El mundo físico" aunque también hablaré del cuerpo, ya que ambas cosas están relacionadas y en esencia son lo mismo.
> En las clases anteriores ya os hablé de cómo la mente está extremamente ligada al mundo físico, tanto en el Mundo Real como aquí. Os comenté además que las ligaduras en el Éter al mundo físico son por partida doble: por un lado la necesidad de poseer un cuerpo para enlazar con la mente y por otro lado la necesidad de que existan los superordenadores que procesan nuestros pensamientos y acciones. Hoy me centraré en el primer punto: la necesidad de un mundo físico y de un cuerpo para que nuestro cerebro pueda desenvolverse correctamente. De los superordenadores puede que hablemos más adelante, pero me parece un tema demasiado rígido y técnico como para que pueda resultar provechoso para vosotros.
> En el Éter la realidad física no es más que una emulación de la mecánica del Mundo Real. Allí la mecánica atómica se encargaba ella sola de que el mundo estuviese en constante movimiento, esta mecánica era totalmente ajena al ser humano; es decir, que las personas no tenían un control directo sobre el mundo que les rodeaba, sino que tenían que emplear herramientas y procedimientos para alterar su entorno y tener un cierto control sobre él. Con esto me refiero a que si una persona quería desplazar por ejemplo una piedra de un lugar a otro tenia que valerse de sus propios medios para hacer que esta se moviese; podía elegir dar una patada a la piedrecita para que esta rodase hasta su nuevo emplazamiento o podía usar otro millar de procedimientos alternativos para llevar a cabo dicha tarea.
> En cambio en este entorno físico simulado se puede tener acceso inmediato a cualquier tipo de evento que ocurra en el mundo y modificarlo. Para mover esa piedra una persona cualificada podría acceder a la posición espacial del objeto y trasladarlo inmediatamente a cualquier otro punto, sea el que sea. En realidad las bases que rigen esta simulación son exactamente las mismas que las del Mundo Real, pero al tratarse de una simulación podemos "parchear" ciertas leyes para adecuarlas a nuestras necesidades.
> Por ejemplo, supongo que sabréis que nosotros no necesitamos comer ni respirar. Nuestro cerebro, para funcionar, no necesita de oxigeno ni alimento ya que nuestros pensamientos los procesan los ordenadores. Estas necesidades no son mas que reminiscencias de nuestra estancia en el Mundo Real. Es cierto que sería una sensación muy extraña para nuestro cerebro que no comiésemos ni respirásemos, ya que estas acciones están intrínsecamente relacionadas con nuestra condición de ser humano, pero aun así en ciertas ocasiones es interesante reprimir dichas necesidades para realizar ciertas técnicas. Poniendo un caso concreto, en el Mundo Real, por culpa de la falta de oxigeno y de la presión, las personas no podían bucear durante largos periodos de tiempo ni sumergirse a grandes profundidades. En cambio hoy en día ciertas personas tienen estos privilegios para desempeñar funciones concretas que de otro modo serían muy difíciles de realizar.
> Estas pequeñas desviaciones en el correcto funcionamiento del mundo físico también son útiles en nuestra vida diaria. En el Mundo Real las enfermedades tanto víricas como degenerativas causaban estragos entre la población, si bien era cierto que no todas eran mortales, eran necesarias infraestructuras para tratar a los afectados con la consecuente inversión de tiempo y dinero. En cambio vosotros por ejemplo no tenéis constancia de lo que es sufrir un catarro, y conoceréis el cáncer y el SIDA por vuestras clases de Historia Antigua. Nuestros cuerpos no están preparados para infectarse de virus, o de padecer anomalías. E incluso nuestros órganos salen favorecidos por estas simplificaciones físicas ya que no son atómicamente funcionales, sino que desempeñan sus funciones de manera mas directa, sin necesidad de recorrer todas las reacciones químicas necesarias...
Las últimas palabras las pronuncio bastante lentamente, a medida que su atención se iba fijando en las caras de los alumnos. Nadie de la clase había sido capaz de entender todo lo quee había soltado, e incluso me atrevería a asegurar que más de uno no se entero absolutamente de nada... Yo había conseguido entender hasta la mitad del monólogo, después los conceptos se entremezclaban creándome un mar de dudas.
- Creo que esta vez si que me he pasado un poco... ¿Habéis entendido al menos el concepto y las ventajas de la simulación del entorno físico?
Algunos asentimos la cabeza (no muy seguros, todo hay que decirlo) para indicar que así era.
- Bueno, algo es algo... Con respecto al funcionamiento del cuerpo... creo que nos centraremos en el más adelante, por ahora prefiero resolver las dudas que tengáis, a ver, decidme.
Yo mismo hice la primera pregunta, ya que no me terminaba de quedar claro a que se refería con "simulación".
- Cuando hablas de simulación de la mecánica atómica del Mundo Real, ¿a que te refieres exactamente? Y tampoco me queda muy claro para que usar leyes físicas del Mundo Real para luego alterarlas...
- Con "mecánica atómica" me refiero a las fuerzas descubiertas por la física que mantenían el universo en constante cambio, estas son la fuerza gravitatoria, la electromagnética, la nuclear débil y la nuclear fuerte; además de, por supuesto, todas las leyes que las regían. Como nuestra parte más animal estaba adaptada al Mundo Real tuvimos que importar sus leyes físicas para no alterar la esencia de la conciencia humana... es algo parecido al problema de la iluminación; todo radica en engañar a la parte instintiva del ser humano para que crea que el mundo no ha cambiado, mientras que nuestra parte racional sabe que este mundo es intangible y etéreo.
> Respecto a la alteración de dichas leyes no es más que una cuestión de comodidad. Si podemos crear un suministro infinito de gas inflamable en el interior de un fuego, por ejemplo, no tendremos necesidad de transportar dicho gas por tuberías para que llegue al fuego. Se "truca" el entorno físico para que nuestra vida sea mas cómoda y sencilla.
> En resumen, lo que hacemos es conservar las leyes físicas para no alienar a la gente, a la vez que con pequeñas "trampas" modificamos el funcionamiento del mundo en campos que no producen alteraciones en la conciencia humana. Ya os he comentado que en ocasiones algunos sujetos tienen poderes para alterar dichas leyes a voluntad, siempre para desempeñar tareas altamente específicas, pero se trata en todos los casos de gente preparada psicológicamente para que dichos poderes no descompensen su juicio. ¿Algo mejor así?
- Si. -Asentí levemente con la cabeza- Aunque de todas formas me parece algo bastante extraño...
Taido esbozó una leve sonrisa y volvió a escrutar la clase en busca de algún alma desorientada. Una compañera de clase fue la que hizo la siguiente pregunta.
- Sé que no tiene que ver mucho con el tema principal, pero, ¿qué clase de gente está dotada con esos poderes y cuales suelen ser?
Esta vez Taido soltó una pequeña carcajada. Parecía que le hacían gracia nuestras curiosidades más vanas y puntillosas.
- Pues sobre todo agentes del estado. Por ejemplo algunos funcionarios, investigadores... algunos miembros del cuerpo de policía también disponen de estos "privilegios". Sobre todo suelen ser de utilidad para científicos, técnicos y agentes de seguridad. Los poderes varían según las necesidades: pero los más comunes son de control y creación de materia y energía. Por ejemplo desplazamiento de cuerpos, creación de corrientes de aire, calentamiento de cuerpos... aunque son en un principio actos bastante sencillos tienen una utilidad tremenda si se aplican correctamente.
- Pero muy poca gente estará preparada para recibir esos poderes, ¿no? Quiero decir, que si tienen que superar pruebas psicológicas para demostrar que no usaran indebidamente esas facultades no habrá demasiada gente así... supongo que tendrán que estar muy preparados...
- Por supuesto que todas esas pruebas son difíciles de superar. Además el Consejo Superior se asegura de la aptitud de dichos individuos con controles periódicos cada seis meses para comprobar que la persona sigue en plenas facultades mentales. Y como ya he dicho estos poderes solo son usados en ocasiones muy puntuales y específicas, así que no es necesario (ni bueno) que haya muchos de estos individuos -Volvió a dirigir su atención a la clase, después de asegurarse que la curiosidad de mi compañera había sido saciada-. Bien, pues entonces hasta aquí llega la clase de hoy, ya sabéis que si os queda alguna duda no tenéis más que preguntarme al comienzo de la clase del próximo día. Que paséis un buen fin de semana, hasta el lunes.
Creo que incluso antes de que terminase de hablar la mayor parte de la clase ya tenía la mochila lista para salir pitando a casa. Yo no fui menos que los demás, y apenas unos segundos después de que Taido se hubiese ido ya estaba preparado para volver a casa y planificar el fin de semana.
A la vuelta estuve hablando con Redmo sobre lo que nos habían contado en clase de los poderes... he de reconocer que resultaba algo muy atractivo. Aunque solo se usase para tonterías, debía de ser genial poder controlar a voluntad materia y energía; aunque solo fuese para cambiar el entorno y hacer pequeños trucos y demostraciones curiosas. Pude dirigir poco a poco la conversación hasta ese tema, interrogando a Redmo como bien pude:
- ¿En serio no te gustaría poder crear bolas de fuego y cosas parecidas? Podría ser una autentica pasada... como si de magos se tratase, igual que aparece en las películas.
- Bueno... estaría bien, pero sería muy inútil para nosotros. Esas cosas solo sirven para fardar una temporada... luego las olvidas. Y además, hablas de películas, pero si lo piensas este mundo parece de ciencia ficción... seguro que hace tiempo a nadie se le ocurriría que llegaríamos hasta aquí.
- Eres el alma de la fiesta... Pues sinceramente, a mi sí me gustaría, aunque solo fuese para hacer tonterías. Pensar que tienes la facultad de hacer cosas que nadie más puede hacer... esa sensación de poder... tiene que ser genial.
- Pues menos mal que hay pruebas para que no puedan adquirirlos pirados como tú -Me miró y se rió-. Por cierto, ¿tienes pensado hacer algo para este fin de semana?
- No había pensado en nada... si quieres podemos ir al cine o al Centro Cívico a echar unas partidas a algo. Sabes que siempre organizan campeonatos de un montón de juegos los fines de semana... -Pasábamos casi todos los fines de semana en el Centro Cívico, pero aun así no nos importaba, disfrutábamos como enanos jugando al ajedrez o al emowar, ya fuese nosotros dos solos o con otras personas-.
- Hecho, esta tarde llámame si se te ocurre algo para hacer, y ya quedaremos para ir mañana a repartir leña. ¡Ah!, ahora que me acuerdo, mañana te enseñare una cosa que me enseñaron a hacer la mar de curiosa...
Por mas que le insistí no quiso decirme que era, con lo que al final me di por vencido. A veces Redmo me parecía un poco cruel, siempre sabía como dejarme expectante e intrigado; supongo que se debía al hecho de que me conocía como a la palma de su mano. De todas formas seguía siendo un excelente amigo; admito que tuve mucha suerte al conocerle, supongo que personas como él no se encuentran en todas partes...
Nos separamos como cada día y al final mi tarde y noche transcurrieron totalmente en casa. No tenía ninguna gana de salir, y preferí quedarme leyendo un libro tranquilamente, después de una merecida siesta, para luego cenar, ver una película y acostarme no demasiado tarde.