Nunca se me ha dado bien la literatura, pero bueno, al leer por aqui, al final intente hacer algo, a ver que os parece:
Un Martes Para El Recuerdo
Martes, suena el despertador, sin ganas de volver a pasar por la rutina de siempre abro los ojos, todo esta igual que siempre, el reloj sonando, la habitación oscura, sola, fría aunque el termómetro marca 30º.
Me siento vacío y me pregunto: ”¿Qué me falta?”, me paro un segundo a pensar, pero no encuentro la respuesta a mi pregunta, sin darle importancia me levanto.
El día se plantea como todos los demás, desayunar, trabajar… volver a casa y dormir.
Cuando me dispongo a salir por la puerta, un recuerdo me viene a la mente, hoy quede con una amiga para cenar… y lo único que pienso es que será una cena como todas las demás, preciosa amistad.
Termino de trabajar, me ducho, voy a recoger a una persona, una amiga como muchas.
Empezamos a hablar en la cena, cada palabra suya ahonda más dentro de mí… poco a poco van buscando el hueco, que tan bien había cerrado para protegerme de la sociedad. Al terminar la cena, solo pienso en esas palabras, esa ternura, por momentos solo pasa por mi cabeza lo encantadora que eres, intento centrarme en lo que me dices, te noto en la cara que piensas, que paso de ti, que no presto atención a lo que me hablas, sigo intentando centrarme, pero es imposible, ya no hay nada que pueda hacer.
De pronto me encuentro ciego, no veo nada, solo tu mirada.
Mis oídos se esfuerzan por oír, entonces mi mente se para, mi corazón toma el control, siento que he perdido todos mis sentidos.
Te cojo la mano, no todos no, el tacto sigue ahí; intento mantener la cordura, tu mirada me tiene embobado, mis ojos se cierran sin poder evitarlo, me dejo llevar, mi corazón manda ahora. No hay nada que pueda hacer, espero que me perdones, porque ya no puedo parar, tus labios atraen a los míos, llega el contacto… si, te estoy besando, disfruto de cada instante… porque creo que va a durar poco, tu te separaras, sigo disfrutando, pero no acaba…
¿Que esta pasando?, me siento raro, pero me da igual, no es el momento de pensar, ahora solo quiero disfrutar, de ese beso, ese beso que nunca pensé darte, y que sin embargo me hace sentir feliz.
El beso termina, te miro a los ojos, tu timidez hace que te abraces a mi, intento mirarte de nuevo a los ojos, no me dejas. Una sonrisa de oreja a oreja se apodera de mi, y te vuelvo a besar, no pienso desaprovechar el momento, no se si volverá a pasar.
Al cerrar los ojos, solo veo tu cara y entonces la pasión se hace conmigo, no quiero parar, no quiero mirar el reloj, por miedo a que este momento mágico termine.
Un ruido me molesta, abro los ojos, y lo único que consigo ver, es el techo de mi habitación, me levanto alterado buscándote, ¿abra sido un sueño?, mis ánimos rozan el suelo…, me paro a razonar… que sueño tan real… me niego a creer que solo haya sido eso, un sueño.
Al llegar de trabajar vuelvo a hablar contigo, te cuento mi sueño, esperando que me digas mentiroso, que eso no lo he soñado, que realmente eso fue lo que paso.