Un minuto dedicado

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Busca; no espera
ese anhelado momento
de cambio, transición,
mejoría condenatoria.

La luna sonríe en el cielo
¿O quizás ríe?
A través de su cortina
no consigue distinguir.
Qué más da.

Intenta imitar
la forma con sus labios,
no es difícil.

Es la primera vez que sonríe hoy.
Forzada.

Llanto, dolor, monotonía.
Cuanto sufrimiento.
Negro. Y más negro.

Se demanda urgentemente
pincel o brocha, es igual
bañado en el color blanco
para una vida pintar…

Todos los inodoros son blancos,
como la luna,
y nadie sabe porqué.
Qué más da.

No busques ritmo a este escrito.

El desorden
lo aviva.

¿O no?
Qué más da.

Su vida sigue siendo negra.

¿Vida?

Escupido queda
este minuto 15
de la hora 23.

En forma de telegrama,
para las mujeres maltratadas,
pínceles hay en cualquier tienda,
la pintura la pones TÚ.
Me gusta. Es diferente a lo que se suele leer.
Dioooooos buenisimo.....

Desordenadamente arritmico y melodico.
Son este tipo de textos los que me apasionan.

[bye] Gracias por el regalo.
Gracias, Wired, por recordarme tus poemas de fotografías y dibujos. Gracias por recordarme tus versos cortos, precisos. Gracias por avivarme el día con tu armonioso desorden. Me ha encantado.
Bueno, muy bueno. Vamos que me ha encantado.

Es esa clase de poemas que mientras lo lees se te pone una sonrisilla mientras que piensas lo bien qué bien está escrito.

Mi más sincera enhorabuena, sigue escribiendo.

Un saludo
Desordenado... puede que si.
Pero el ritmo a pesar de no haberlo buscado, lo he encontrado. :)
Muy bueno y original que eso tambien es importante.
Gracias a todos por leerme!

Me alegro que os haya gustado. La idea de crear esta especie de poema sin un ritmo concreto surgió sola, así el texto trasmite más desorden que es lo que pretendía, cómo la vida y sentimientos de la protagonista.

Un saludo!!!
6 respuestas