Sentí en mí una sensación como nunca antes había vivido, es mas, no creo que hasta entonces hubiese vivido sensación alguna, o al menos no fui consciente de ellas. Todo me era extraño, no reconocía aquel lugar, estaba solo, desnudo, pero sin embargo me sentía seguro, la paz era infinita y la sensación de placer era tal que mis párpados eran incapaces de separarse.
He pasado así algún tiempo, no me preocupo por nada ni por nadie… es mas no hay nadie por quien preocuparse… pero, empiezo a sentirme extraño, no quiero estar mas aquí, me revuelvo e intento encontrar una salida, no puedo aguantarlo, algo no me deja respirar… mi corazón se agita, lo siento a punto de estallar, mi miembros no me responden, tal vez porque nunca los he usado, algo me aprieta el cuello… ¿Que esto? No puedo casi ni pensar, pierdo el conocimiento, veo mi minúsculas manos amoratadas… una luz al final… no se como me dirijo a ella, no, me dirigen… no soy consciente de moverme… noto una presión en mis tobillos, pero extraño, ya nada me oprime el cuello, ¿dónde estoy?... Noto un golpe en mi muslo, los nervios me hacen llorar desconsolado… ¿por qué he abierto los ojos? ¿Quién eres tú, y porque me agredes?.. estoy confuso… una voz que no entiendo, un rostro desconocido, hasta que, al fin…
Tú si que se quien eres, tu voz me suena, llevas tiempo en mi cabeza, me susurras dulces voces y entonas impagables melodías, y ese olor… Me acunas en tu pecho y por fin entiendo lo que significa sentirse seguro, aquí nadie podrá hacerme daño, eres frágil pero la fuerza de tu cariño y tu ternura se que nunca dejará que nada me pase. Aun no se quien eres pero se que te conozco… y lo mas importante, aun no se por qué pero se que te quiero… Creo que te llamaré… Mamá…
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Es un intento de algo que me rondaba un tiempo por la cabeza... no se que os parecerá...
Gracias.
