Bueno, la semana empezó el día 23, viernes. Aquel día, dos depuse de haber acabado el curso, me dirigí a clase, listo para preparar la fiesta de fin de curso. Siempre me ha gustado ayudar en ese tipo de cosas, y aquel día no iba a hacer una excepción.
Una vez llegué a clase, junto a Emilio, un amigo mío con el que siempre bajo a clase, estaban algunos compañeros copiando el horario de selectividad. Mientras, iba bromeando con mis compañeros, entró Noelia. Noelia era una grandísima amiga mia, pero que, hacia ya tres meses, no me dirigía la palabra. (y aún no se exactamente por que). El caso es que juntamos las mesas, y nos pusimos manos a la obra. Primero, se comentó -Que alguien vaya a por material-, pues ale, yo, alegremente voy, y ella, también. Una vez en el pasillo nos damos cuenta de que vamos los dos, y durante el camino, ya soltamos alguna cosilla en plan broma, pero nada. El caso es que nos quedamos toda la puñetera mañana subiendo y bajando escaleras, yendo a por material, y con un buen royo de la ostia. Ya por la noche, empezó la fiesta de fin de curso. Después de recoger la banda, royo miss, con el escudo de mi colegio, se inició la fiesta. Comida, cava, y música pachanguera en la megafonía del patio, nos lo pasamos de puta madre, aunque la fiesta solo acababa de empezar. Nos hicimos unas fotos todos, y tal, además de picarme con Fran a ver quien se bebía mas copas de cava, ganó el con 11, una mas que yo, aunque el potó a las dos horas, así que me considero el ganador
, cuando me dirijo a Salou, para irnos todo el curso de marcha, me encuentro con que me voy a cenar con ella y mis amigos, a cenar por ahí, antes de irnos a “Blue Bahia”. En fin, un problema de mi vida, que era aquel, ya estaba solcionado.
Llegamos a Blu Bahia, nos adueñamos del podio, y hasta las 5 estuvimos allí (nos echaron), pero bueno me lo pasé en grande. Mi compañera de clase Cristina, muy modosita ella, se pego un baile con el gogó (bueno mas de uno xD). También nos acompañaron dos profes, Estiarte, que es mas juerguista que toda la clase junta, y pilar, que es nuestra sustituta de inglés, y también le va la marcha desenfrenada xD. Al día siguiente, una vez despierto y despejado, después de estarme un buen rato meando (creo que bebí demasiado), me conecté al mesenger, con la sorpresa de que tendría que ir al cumpleaños de Noelia... desde luego no era lo que tenia en mente pero me alegró que se me tuviera en cuenta, a pesar de los percances.
En fin, el día del cumpleaños me lo pasé de puta madre con mis amigos, muchos de los cuales ya no hablaba tanto por que, a causa de el cabré que tuve con ella, no quedaba con ellos. Mas alegre aún por la amistad recuperada de todo cristo, llegó el jueves... las notas.
A las nueve en punto de la mañana, como un clavo, me presenté en clase. Antes de recibir las notas, y para hacer mas tensa y larga la espera, hicimos una misa. Yo como ateo que soy, no participo, pero estoy allí, respetando la ceremonia, y cantando para dar voz, que al fin y al cabo, solo son letras. Yo estaba realmente asustado. Mi profesora, Maria del Mar, siempre tiene muy buen royo conmigo, pero aquel día estaba mas seria cuando me hablaba...”ai, que me toca repetir”, pensaba yo. Una vez hecho las lecturas de la misa, que fue rubricada con “Imagine” de John Lennon, nos dirigimos a clase. Nervios. Eso era lo que se respiraba. Cada vez que uno de mis amigos recibía las notas, no podía evitar mirarles y a la cara y ver esa sonrisa que me indicaba que habían aprobado. Llegó mi turno, cogí las notas, y vi como todo estaba aprobado, después del susto inicial, por que confundí el numero de los créditos con el de las notas... Mi gran amiga Marta, también aprobó, estaba súper nerviosa, por que estaba convencida de que iba a suspender, me pegó una abrazo cuando vio que aprobó, me entró mucha alegría en el cuerpo después de ver que, todo, salió como se esperaba. Además,.le debo una cena, que no se me olvide, jeje.
El viernes fue un día realmente movido. A las nueve de la mañana, con cinco horas de sueño a mis espaldas, me encontraba en el autobús hacia Tarragona, para completar mi inscripción a los ciclos formativos, con Marta, Mireia, José Maria y Javier. A la una pasadas, estaba yo en casa, por vestirme y asearme, para coger el tren a las tres e irme a Barcelona, al Mega Aplec Dance 2003. El tren se retrasó una hora, nada, llegamos a las seis y pico a Barcelona, comimos en el McDonalds, (que gran cosa son las paredes de cristal, se ven a todas las tías mientras comes xDDD). Allí esperamos a unos amigos de Eladi, un colega mío, eran Luis y Edu, (tíos de puta madre!!). También se unieron a la expedición nueve mas, de los cuales no recuerdo el nombre, por que tampoco hablé mucho con ellos. Durante la noche pasaron muchas cosas, como por ejemplo, mi amigo Javier, que creo que se planteará su vestuario o su forma de bailar, no se, pero es que le preguntaron cuatro veces que a cuanto dejaba las pastillas. Luego, un pavo estaba sentado al lado de Edu, supercolgao, se levanta, se le acerca y le dice, “Oye, me dejas tus gafas?”, “No, no tengo”, “Ok tío, me voy que estoy volandooooooo...”, mas tarde le vimos con una pava que estaba igual, y los dos, tan felices inmersos en una aventura psicotrópica, se largaron... y así llegamos ya las cinco de la madrugada, cansado después de diez horas de baile, con un Dj que no parecia conocer la palabra “acabar”,y unas luces que me empezaban a tocar los cojones. Se acabó. Antes, Javier, pensó “coño, esperaos al final que seguro que hacen algo guapo”, si, fue realmente espectacular “hasta el año que viene, ale, adeu!” xDD
En fin, llegué a casa a las ocho de la mañana, al entrar por la puerta me despedí de mi padre que se iba a currar, y yo me tiré en la cama, rendido, hasta que el cansancio me obligó a caer en los brazos del sueño...
Está a sido una de las mejores semanas de mi vida, sin duda.
Gracias por haberlo leido y siento la parrafada, saludos!!