Este año se lucieron con el "pasaje del terror" pero he visto descuidadas otras zonas del evento. Faltaban consolas... muchas, otro años hubo el triple y con flashcard para elegir el juego que quisieses. La sección mercadillo daba penilla, poca oferta y precios altos. Y eché de menos recreativas tipo video sonic, pues en ediciones anteriores hubo al menos una docena. Sin embargo. las exposiciones fueron fantásticas como siempre y las arcades temáticas eran chulísimas. Cada año hay más asistencia, pero espero que no baje el nivel.