Mi pareja y yo en 30 m2 nos moririamos, aunque por supuesto no todos somos iguales. Me resulta muy claustrofóbico.
Yo mi vida diaria la hago con mi pareja en un piso de 75 m2, con dos habitaciones, vestidor, salón, cocina y 2 baños. Perfecto para una pareja.
Valoramos el barrio, que es el mejor de la ciudad, su absoluta tranquilidad, las calidades y la distribución del piso, tipo espacio abierto y la luz y ventilación.
En este sentido, tiene ventanas en las cuatro orientaciones y el salón cuenta con dos cristaleras del suelo al techo en esquina, con sol de mañana.
Y aún así y con el trastero, para mí es insuficiente, porque entre otras cosas la colección la tengo en otro piso de la ciudad.
Si fuera por mí, viviríamos en una casa que tenemos en un pueblo a 35 minutos en coche de la ciudad, pero mi pareja no quiere depender del coche y vivir lejos de las comodidades de la ciudad, cosa que entiendo.
Así que para disfrutar del jardín, las barbacoas y las salidas en bicicleta, subimos los fines de semana.
Vamos, que no hay casa perfecta.