A mi el Ecco siempre me pareció un coñazo, y eso que lo tengo original y todo, aunque igual es que nunca lo entendí.
Sobre el tema artístico, tanto el sonido como lo original que es su planteamiento si es cierto que no está nada mal, pero si no acompaña la jugabilidad el conjunto se queda en nada.
La verdad es que prefiero mil veces el Kolibri y su explosión brutal de color además de una jugabilidad de las de toda la vida, sin más.
Pero bueno, creo que Sega ha hecho buenos juegos en los que cuenta con un nivel de detalle y esfuerzo en la ambientación en el que pocas compañías se suelen fijar, véanse los Yakuza o quizás Valkyrie Chronicles. Y también ha apadrinado proyectos similares como los de Platinum. Ahora bien, no puedes pedir maravillas ni retornos al pasado cuando cosas como la mejor adaptación de un clásico de Sega que se ha hecho en los últimos años, y no me refiero a otro que a PZO, ha sido totalmente ignorado y ninguneado, quizás por seguir con la filosofía arcade.
Por que Ecco no es más que una excepción en el pasado de SEGA (entre algunas otras), SEGA era sinónimo de arcade y el arcade ha muerto, yo creo que cosas como un nuevo RPG o una política de distribución acertada si son buenas muestras de adaptación. Aunque evidentemente la mejor adaptación posible desde el punto de vista comercial es ponerse a vender pseudo-juegos musicales, básculas y bicicletas estáticas si hace falta, eso es innegable.
De hecho estoy esperando a ver que ventas cosechan cosas como MadWorld en Wii. En el fondo pedir adaptación y pedir una determinada política de juegos son cosas contradictorias.