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Protech no ha presentado plan de viabilidad en su "Concurso Voluntario de Acreedores", por lo que la sociedad se disuelve. Si alguien compra los terrenos, se repartirá el dinero entre el banco (hipoteca de los terrenos) y los compradores (nosotros). Mañana en el periódico Hoy Extremadura
No se harán al liquidarse la promotora
El triste final de la segunda fase de Cuartón Cortijo no sorprende. Los problemas para arrancarla que se conocieron hace años se han ido acentuando hasta acabar con la liquidación de la sociedad promotora, la empresa de Don Benito Protech Extremadura.
:: PAKOPÍ Solar donde se debería levantar la segunda fase, al fondo los pisos de la primera.
En julio del año pasado se supo que la sociedad entraba en concurso de acreedores, ahora once meses después, fuentes jurídicas conocedoras del proceso confirman que finalmente Protech no ha superado este proceso y será liquidada.
La liquidación tiene una consecuencia inmediata: la 135 viviendas de la segunda fase quedan totalmente descartadas. Tampoco es una sorpresa, pero los adjudicatarios de estos pisos de promoción pública agraciados en un sorteo celebrado en 2008 no perdieron la esperanza.
La junta de acreedores debería celebrarse la próxima semana y si se aprobaba había posibilidades de ejecutar la obra, pero ahora han sabido que finalmente, ni tan siquiera han presentado un convenio para llegar a un acuerdo con los acreedores. Las mismas fuentes jurídicas confirman que efectivamente no hay convenio y será liquidada, y por tanto, no hay opción alguna de rescatar el proyecto.
A Javier Morgado, uno de los adjudicatarios de hace cuatro años, no le sorprende el desenlace. Cuenta que en estos años la empresa no se ha interesado por ellos. De Protech sólo recibió un crisma de Navidad en 2008 a pesar de que ha intentado varias veces informarse. Acudió incluso a abogados para reclamar los 624 euros que entregó con la firma del contrato, pero le dieron pocas esperanzas de recuperarlo. Tampoco la Junta, que actuó de mediadora, supo darle muchas explicaciones, y finalmente desistió. Dio el dinero por perdido y se compró una vivienda en otro barrio.
Como Javier hay casi un centenar de adjudicatarios que firmaron estos contratos. La promoción tiene 132 viviendas y el año pasado representantes de la empresa confirmaron que antes del concurso habían comercializado el 90% del total. Los que aspiraban a las viviendas de 60.000 euros entregaron 624 euros y los de la promoción media 4.000. Ahora, nadie les garantiza que vayan a recuperar su señal.
En teoría, la ley les protege porque obliga a los promotores a firmar un seguro o un aval cuando reciben entregas antes de la obra. Con este mecanismo, ante cualquier incidencia, pueden reclamar la devolución más los intereses a la aseguradora, pero a Javier no le entregaron ningún aval ni seguro. De su ingreso sólo tiene el resguardo del banco y una factura. Fuentes jurídicas que conocen el proceso han confirmado que no se ha podido acreditar que Protech firmara este aval o seguro. Ahora, al centenar de perjudicados les queda esperar a que se vendan los terrenos junto al polígono el Nevero donde se iban a levantar los bloques, y si la venta da para repartir entre todos los perjudicados. Además de los compradores, también hay que resarcir al resto de acreedores, entidades financieras incluidas, pero puede que la venta ni tan siquiera cubra los créditos hipotecarios que se pidieron para los solares. En este caso, lo han perdido todo.
La solución para todos pasa porque aparezca un comprador interesado en los terrenos.