Este 15 de noviembre se cumplen 15 años del lanzamiento de Xbox. La llegada de esta consola marcó un antes y un después en la industria del videojuego, pues con ella se sentaba en la exclusiva mesa de fabricantes de consolas ni más ni menos que un gigante como Microsoft. La situación no era fácil; Dreamcast ya estaba en el mercado, PlayStation 2 arrasaba y GameCube hacía lo que podía.
Microsoft se estrenó en el mundo de las consolas con una máquina que pesaba ni más ni menos que seis kilos. Lo cierto es que parecía un trabajo de última hora, con un sistema basado en la arquitectura x86 (algo poco habitual en una consola) con procesador Intel, tarjeta gráfica de Nvidia, 64 MB de memoria RAM y disco duro con 8 GB de almacenamiento que terminó por dar muchas alegrías.
Xbox consiguió un aceptable arranque en Estados Unidos, pero cuando la consola llegó a Japón y Europa (febrero y marzo del 2002 respectivamente) se convirtió en una tragedia. Sus bajas ventas obligaron a Microsoft a
rebajar la consola hasta los 299 euros (igualando el precio de PS2) en un movimiento que mandaba dos mensajes: desesperación y ganas de triunfar en este mercado. Aquellos que compraron la consola antes de su rebaja (que se produjo el 26 de abril de 2002) recibirían a cambio dos juegos y un mando.
Entre los juegos disponibles durante el lanzamiento de Xbox encontramos ni más ni menos que Halo: Combat Evolved, Project Gotham Racing (también ambos celebran su 15 aniversario) y Dead or Alive 3. Para muchos usuarios el mando de regalo era más una venganza que una recompensa. El Xbox Controller era inmenso y está considerado como uno de los peores jamás vistos (ganó premios en este sentido). La salvación vino desde Japón, donde Microsoft distribuyó el Controller S, un modelo más pequeño que por demanda popular terminó convirtiéndose en el estándar. Gracias a las pequeñas manos de los japoneses ahora el mando de Xbox está considerado uno de los mejores.
Aunque no fue una consola longeva, Xbox cuenta en su haber con juegos que ahora mismo serían la envidia de cualquier sistema. A Halo y Project Gotham Racing hay que sumar obras como Ninja Gaiden, Otogi, Phantom Dust, Conker, Panzer Dragoon Orta, Metal Wolf Chaos, Splinter Cell, Forza Motorsport, Star Wars: Knights of the Old Republic, MechAssault, Dead or Alive Xtreme Beach Volleyball, Jade Empire o Jet Set Radio Future. Tal vez algún día todos ellos serán compatibles con Xbox One.
Xbox pasará a la historia por ser la primera consola de Microsoft, dar pie a Xbox 360, estrenar Xbox Live (el primer servicio de videojuegos en línea para consola con cara y ojos), ver el nacimiento de la saga Halo y por ser uno de los dispositivos más manoseados por la
scene. La comunidad destripó de arriba a abajo la consola. No quedó ni una sola parte de su hardware o software que no quedara expuesta.
Xbox se convirtió en el mejor dispositivo multimedia del momento (podía reproducir cualquier archivo) en parte gracias a Xbox Media Center o XBMC (hoy conocido como Kodi). También era posible cargar respaldos e instalar prácticamente cualquier emulador como M.A.M.E, programas y
homebrew. Aparecieron infinidad de chips como Neo-X (el primer de todos), Enigmah o el célebre Xecuter. Tal llegó a ser la incidencia de la
scene que aparecieron
dashboards alternativos como Evolution-X, que permitía ni más ni menos que flashear la BIOS de la consola desde su interfaz, instalar programas o ejecutar discos personalizados que instalaban todo tipo de software, permitiendo incluso dejar la consola como salida de fábrica. Toda una revolución en la que muchos aprendimos gracias a la paciencia
de otros.
Xbox terminó vendiendo poco más de 24 millones de unidades y su vida comercial fue bastante corta. El 2005 Microsoft cogió todo lo aprendido con su primera consola y lanzó al mercado Xbox 360, hasta ahora el dispositivo más exitoso de la compañía con más de 85 millones de unidades despachadas.