Han pasado ya nada menos que once años desde que Xiaomi lanzó en China su primer teléfono, el Mi 1. Este terminal con prestaciones de buque insignia y precio sorprendemente ajustado fue un torpedo lanzado a la línea de flotación de marcas otrora tan potentes como Huawei y ZTE. También estrenó la enseña Mi, atribuible según el propio CEO de la compañía a los conceptos Mobile Internet y Mission Impossible. Con el tiempo, Xiaomi terminaría dando a Mi categoría de submarca; una distinción que ahora llega a su fin.
Según publican
XDA Developers y
The Verge, la gama de productos Mi será renombrada directamente a Xiaomi, perdiendo el apellido Mi en aras de una simplificación que el catálogo de la casa pedía a gritos y que se inició por sorpresa con el
Xiaomi Mix 4. Una vez finalizada la transición, la gama troncal del fabricante quedará compuesta por dos líneas diferenciadas: Xiaomi y Redmi. Poco (y la filial
gaming Black Shark, se intuye) seguirá trabajando en paralelo, como hasta ahora.
El devenir de la submarca Mi es interesante. Coincidiendo con su desembarco en Occidente, Xiaomi se propuso potenciarla y darle un mayor protagonismo para evitar ese aura de "teléfono chino" que todavía afectaba a muchos de sus rivales. El consumidor, sin embargo, ha tenido bastante claro desde el principio lo que eran Xiaomi y sus teléfonos, y de hecho, los prejuicios iniciales no parecen haber lastrado sus ventas. Ahora que Mi y Xiaomi son uno y lo mismo a ojos de los usuarios, no parece tener sentido mantener una diferenciación entre marca y submarca que ni siquiera era efectiva.
Así las cosas, a partir del tercer trimestre de este año toda la gama Mi será conocida directamente como Xiaomi [modelo] como parte de un proceso global de unificación de marcas que, según la compañía, "podría llevar un tiempo" en completarse en todas las regiones. Los cambios afectarán además a dispositivos domóticos y de estilo de vida, por lo que productos como webcams y patinetes también pasarán a utilizar la marca y el logotipo de Xiaomi.