Y la luz se iso (relato de sci-fi)

La luz se hizo, me esforcé por abrir los ojos, cuando lo conseguí vi un techo marrón, me recosté pesadamente, con una extraña sensación de bienastar, mire mis manos, estaban como las recordaba pero sin las arrugas de la vejes. Con precaución me toco el rostro y me lo encuentro liso y con los mechones de mi antigua melena, no comprendo nada. Miro a mí alrededor, estoy en un cuarto gris, sentado sobre la cama. Los recuerdos bailan en mi mente, recuerdo a mi esposa, amis hijos,.. a kevin mi vecino… recuerdo mi trabajo como bombero….

Estaba a solo 2 semanas de jubilarme. Recuerdo aquel incendio terrorífico, había ardido ya todo un centro comercial cuando el fuego salto a una residencia de estudiantes a medio evacuar, sin pensármelo dos veces había saltado hacia las llamas, no recuerdo cuantas vidas salve, pero cuando iba a abandonar oí aquel lamento, una chica lloraba en el piso de arriba, oí el crujir de la madera, la estructura cedería en poco tiempo pero corrí escaleras arriba asta encontrar a la chica que gemía bajo una manta, la alce en brazos y me acerque a una ventana, mis compañeros estaban desplegando una de las nuevas redes para caídas, se auto montaban e inflaban en segundos pero solo permitían una caída… Mire a la chica mientras la madera de las vigas crujia apunto de ceder. Contemple su rostro angelical manchado por el hollin, le di un beso en la frente deseándole suerte y la lancé hacia la red. Gracias a dios la red amortiguo el impacto y se desmontaba mientras los equipos de rescate auxiliaban a la chica e intentaban montar una red para mi… pero yo oía el crujir de las vigas maestras, el desconchar del techo, el crujido del suelo al ceder, mire a mis compañeros y con un gesto marcial me despedí de ellos para siempre…

Esto es lo ultimo que recuerdo… entonces, ¿en que lugar estaba?:

-¿El cielo?- pregunte en vos alta- ¿Dónde diablos estoy?

-Estas en el futuro abuelo- la vos salio de un joven vestido con prendas traslucidas que parecían reflejar el entorno a un extraño ritmo musical- en un entorno de RV (realidad virtual)

El joven había aparecido de la nada, materializado en mitad de la habitación y no parecia sorprendido por esto hecho.

-¿abuelo?- pregunte extrañado- ¿eres acaso mi nieto? - estaba confuso- Un momento –Le pedí, volví a mirarle a los ojos y vi en ellos el reflejo de Carla mi hija- ¿Tu eres hijo de carla no es verdad?

-Si- me confirmo el joven- Me llamo Kevin. – E hizo un saludo cruzando sus dedos- Soy su hijo menor, tengo dos hermanos, pero claro, ¿tu solo conociste al primero verdad?

-Claro, el pequeño Jonathan..- Recordaba a ese pequeño bebe- Pero la ultima ves que le vi era solo un bebe.

-Es normal -rió Kevin- han pasado 30 años desde entonces, esto - Señalo a su alrededor- Es un entorno virtual, ni tu ni yo estamos realmente aquí, ni esta es una habitación real, pero para mi cerebro y para los datos que asemejan ser tu conciencia esto es real, pero en realidad tu moriste en aquel incendio -decía mientras contemplaba mi desencajado rostro- Te consideraron un héroe y te dieron varias medallas al valor como bombero, además la chica a la que salvaste acabo casándose con tu hijo May.

-Gracias por la información- conteste con vos lacónica- Pero aun no me has contestado ¿Qué hago aquí?, no creo que me hayas despertado solo para saludarme.

-No es verdad- Volvió a reír este extraño chico de pelo azul.- Cuando moriste fuiste de los primeros cuyo cerebro fue escaneado y guardado en una base de datos para futuras consultas, pero asta el día de hoy nadie había tenido un encuentro así contigo, la razón de que te llamara es que necesito consejo…. –Kevin bajo la cabeza-

-¿Consejo?, y por que no preguntas a tus padres- pregunte desconcertado, la idea de despertarme para pedir consejo me sonaba ridícula.

-Han muerto…- Del rostro de Kevin broto una lagrima virtual- ase un año en un accidente en un avión, murieron mis padres, tu hija… y además no pudieron recuperar sus cuerpos…

-Carla…- dije apenado- Debes haberlo pasado muy mal.

Entonces me di cuenta, de que por muy futuro que fuese, aquel era un joven destrozado… huérfano, como todos los que han habido a lo largo de la historia.

-Estoy perdido, no se que hacer, entonces pensé en ti, en el héroe de la familia -me miro sonriente mientras se limpiaba las lagrimas- Mi madre siempre me hablaba de ti, de lo valiente que fuiste, as sido mi héroe toda mi infancia.

-Tranquilo Kevin- dije cariñosamente pues no me lo esperaba la verdad la confesión de mi nieto- aquí estoy para ayudarte, pero necesito saber mas… estoy en un futuro desconocido,

-Claro que tonto he sido- de una pared surgió un terminal de ordenador como nunca había visto, parecia un panel traslucido lleno de recuadros de colores- Suele estar prohibido que las conciencias de los “archivados” sean conectadas el mundo pero haré una exención.

-Gracias- pude decir antes de que aquel torrente de infinita información inundase todo mi ser, Estuve segundos, horas… el tiempo dejo de tener sentido. Aprendiendo todo lo posible de este futuro, de este nuevo mundo. Gracias a esto pude ayudar a mi sobrino, nada fue mas fácil, simplemente altere sus cuenta corriente y le encontré una novia perfecta para el (cotejando las bases de datos). Todo esto lo hice desde la clandestinidad, pues lo primero que hice fue crear un archivo fantasma en el Server de “Archivados” para que no sospecharan que me había escapado, o mejor dicho, liberado.

Ahora estoy con toda la inmensidad del ciberespacio, puedo hacer cualquier cosa en cualquier lugar, las barreras no son mas que datos que puedo alterar y nadie execto mi sobrino conoce mi existencia. Alguna ves tomo la forma de un ciborg y me paseo por el mundo ayudando en todo lo que puedo pues hay mucho por hacer…, he empezado a alterar bolsas, donar dinero de organizaciones mafiosas a ONGS, a realizar mil actos que por si mismos no son nada, pero juntos forjan un futuro mejor, según mi plan. En lo que queda de mi mente comienzo a olvidar quien fui los recuerdos de mi antiguo ser sor archivados en lo mas oculto de mi nuevo ser, ahora solo soy yo, el que maneja controla la red, el que esta en todas partes en todas las terminales, en todos los robots de mantenimiento, en todas las cabinas, ahí estoy yo. Algunos gurus se han percatado de mi existencia y entre susurros hablan de un dios, pero que saben ellos de dios.


[Este relato lo he escrito esta mañana, espero que os guste, era una idea que se iva rondando por mi cabeza desde hase un par de dias, pero a peticion de Morpheus24o lo he revisado y le dado mayor coherencia]