[El adjunto fue extraído de su blog personal o bitácora en internet, al cual se puede acceder mediante el enlace arriba mostrado.
En estos momentos se está revisando su ordenador para obtener más material sobre el que trabajar.]
A ver, 28 de abril del año pasado, hasta hoy... Sí, como quince meses.
Y durante todos ellos sentía que íbamos cuesta abajo.
La pregunta es, por supuesto, si alguna vez estuvimos realmente en lo alto. En varias ocasiones venía a mí con cara larga y un hilillo de voz con el que me arrojaba una retahíla de clichés y tópicos. “Tenemos que hablar”, “no sé si esto va a funcionar”, “el problema soy yo”… Me veía forzado a asentir gravemente, mirando al cielo; y aprovechaba para clavarle los ojos con desprecio a Dios por ser una mierda de guionista patético. Así es, Le culpaba por eso en lugar de por crearla con esa forma de ser.
Luego continuaban argumentos con algo de solidez, los que me obligaban a esmerarme más para rebatirlos.
“Es que te saco tres años” Le hacía ver lo común que era el caso inverso, veinteañeros emparejados a putones de quinceañeras. También me justificaba con ser mayor de edad, por muy reciente(y a mi juicio, irrelevante) que fuese dicha característica. Me contuve, MUCHAS VECES, de decirle que era YO quien le saca tres años de edad mental. Alguna vez le pregunté cual era su C.I., pero me dijo que nunca se había hecho un test. Ni sospechaba el motivo de esa pregunta, con lo que supuse que no llegaría a las tres cifras…
“Tengo miedo de que me hagas daño en el futuro. Me lo han hecho antes, y viendo cómo ha sido tu vida hasta ahora…” Bien. De puta madre. Al principio de la relación, en un acto de confianza absoluta, mientras vuestros cuerpos desnudos aún están en contacto, desnudas tu alma: le cuentas hasta los resquicios más oscuros de tu circunstancia pasada y presente, de cómo has soportado estóicamente AVALANCHAS DE PUTA MIERDA en casa, en clase, en todos sitios. Se lo expliqué. Tras caer tanto sobre mí, había llegado el punto en que todo me lo tomo con calma. Para bien o para mal: ni llorar, ni sonreír. Y ella va y se vale de tu sufrimiento como UNA EXCUSA PARA QUE PUEADS SUFRIR MÁS?
Cierto que muchas veces salen locos de casas de locos(y mi caso aún está por ver), pero un desquiciado hijo de puta puede nacer en las mejores familias. Si yo no merezco al menos el beneficio de la duda, me gustaría saber quién. Sus dos ex, que la trataban como mierda y les aguantó durante un total de treinta meses? Le explicaba esto, con un tono más censurado todavía(la versión íntegra incluye úlceras que esputan sangre por mi boca y cristales rotos), y lo aderezaba con que “precisamente, tras tanto sufrimeinto, sé valorar que eres lo mejor que me ha pasado. De lo poco bueno que me ha pasado”. Al principio, esta frase tenía unas gotas de hipocresía. Con el paso del tiempo, acabé sintiendolo con toda sinceridad. Para bien o para mal.
“Creo que sólo estás conmigo por estar con alguien” Me horrorizaba que pensase eso. Sobre todo porque, al menos al principio, era cierto. Hoy es el día en que pretendo contar el 100% de la verdad. Bueno, 99% y es mi última oferta.
Al principio, como he dicho, me fijé en ella más por disponibilidad que por otra cosa. Sin embargo, pronto me sentí tan unido que no necesitaba motivos coherentes para quererla. Mi estoicidad se ablandó más que lo suficiente como para quererla por encima de todo. Para bien o para mal.
Los meses avanzaron, con ella repitiendo esta rutina de inventarse crísis cada dos por tres. Esto se fue añadiendo a la lista de motivos lógicos para no apegarme a ella. Mi cerebro no dejaba de repetírmelos siempre que estaba con ella, pero mi corazón no dejaba de… bueno, de bombear sangre. El caso es que mi amor irracional parecía permanecer intacto. La inestabilidad de ella también oscilaba, alternando días “igual lo dejamos” con días “no me dejes nunca”. Y yo oscilaba detrás, temiendo ser prescindible o temiendo ser imprescindible. Una voz me decía “no te merece”, y la otra “no la mereces”. Me cago en todo. Una de las dos, CUALQUIERA, debería haberse callado para siempre.
Y la última noche que estuvimos juntos, de cena, y en fiestas. Todo indicaba que se encontraba a punto de entrar en otra crísis. Y, por algún motivo, a mí me venía a la memoria contínuamente algo cantado por Andrés Calamaro. Llevaba sin oír la canción meses, años quizás, pero por algún motivo, no me podía sacar de la cabeza un fragmento. En serio. Un par de versos que, por algún motivo, eran la única letra que podía recordar.
Me dijo que iba mal. El resúmen de varias horas de diálogo aderezadas por alcohol, fue que quería un descanso. “Gracias, Dios”, dije para mis adentros, “por lanzarme otro tópico a la puta cabeza”. Lo del descanso o paréntesis es uno de los eufemismos con significado más abierto que existen; cuando le pedí que concretara, me dijo que se sólo se trataba de una semana sin contactar de ningún modo, para poder pensar. Acepté. Dormimos en mi casa. Dormimos. (los detalles son el 1% restante)
Al día siguiente, la acompañé hasta el metro. No hubieron muchas palabras, ni mucha tensión. Nos dimos un escueto beso y un “agur”.
Al día siguiente, me llamó al móvil. Me dejaba permanentemente. No existía nada(ambos lo admitimos) que yo pudiera decir o hacer para cambiarlo. Cada dos frases que yo le decía, ella me espetaba una diciendo que le hacía chantaje emocional. Pero le estaba hablando con más sinceridad que nunca. Siguiendo el patético aunque manido recurso de dar lástima, quise llorar. No pude. Quise, pero no pude llorar. Tantos años de férreo estoicismo, por lo visto, habían hecho mella. Creía que no poder sonreír con sinceridad era para mal, mientras que no poder llorar era para bien. Nunca me he equivocado tanto.
Me hizo acordarme de la canción, y volví a canturrear el fragmento dado lo oportuno. Ella, que la recordaba de la otra noche, sintió curiosidad. Busqué “sus ojos se cerraron” en goear.com y la versión cantada por Calamaro apareció la primera. Se la puse en el micrófono, y se enfadó llorosamente mientras me acusaba de seguir con el chantaje emocional. Cómo envidié su llanto. Mis lágrimas, trenzadas, se negaban a brotar.
No llegamos a las dos horas de conversación por un par de minutos. Colgamos, y me dejó con la vana esperanza de que volviese a mí tras planteárselo mejor. No es que ella tuviese la cara de decir eso; se lo propuse yo. Amor patéticamente incondicional. Una de mis voces se había callado, pero, dado el momento, era la equivocada.
¿Acabó así el día? No, en absoluto. Nada más colgar, y quiero decir nada más colgar, recordé un momento del día anterior. La estación de metro fue, quizás, el último lugar en que la habré visto. Y el leve beso en los labios que, algo reluctantes, nos dimos, el último contacto que habré tenido con su piel.
Increíble pero cierto. El muy cabrón volvía a mostrar Sus penosas dotes de guionista, acabando mi historia con un gigantesco cliché. Le había dado el último beso sin saber que iba a ser el último. Me veía en el clímax de una obra de proporciones asombrosas. No sabía si reír o llorar. Y, por primera vez en años, una única lágrima trepó mis pestañas para caerme por la mejilla derecha. La inoportunidad de esto me provocó el tipo más extraño de gracia que había sentido nunca; y esto, a su vez, la mueca más extraña que mi boca había hecho nunca. La estatua de hierro de mi estoicismo, al ser golpeada con un martillo, sonaba hueca. Para bien, para mal, o ambas.
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[Le agradezco sus observaciones, Doctor Cruz, así como su decisión de colaborar. No había reparado en que los pocos errores ortográficos son ultracorrecciones en tildes. Añade peso al perfil “egocéntrico-obsesivo” que habíamos desarrollado.
Cambiando de tema, habrá notado que hoy también le envío un documento adjunto. Recién se ha hallado la que probablemente sea la última conversación vía mensajero instantáneo. En su ordenador también se encuentran algunos documentos de texto protegidos por contraseña, pero ya están trabajando en ello. Probablemente mañana mismo le pueda enviar lo encontrado]
16:07:28 Arlas666 eeeeeeeeeee
16:07:33 V de Vurro aaaaaaaaaaaa
16:07:44 Arlas666 uuuuuuuuuu
16:08:10 V de Vurro Las lágrimas, trenzadas, se niegan a brotar;
16:08:18 V de Vurro Y no tengo el consuelo de poder, llorar.
16:08:26 V de Vurro iiiiiiiiii
16:08:30 Arlas666 tu eres tono
16:08:36 V de Vurro Soy un barítono.
16:08:41 Arlas666 eso
16:09:25 Arlas666 k andas?
16:09:30 V de Vurro que?
16:09:37 Arlas666 k k aces
16:09:42 V de Vurro ahora mismo?
16:09:46 V de Vurro te estoy utilizando
16:09:58 V de Vurro para dar de hostias al Cuarto Muro
16:10:08 V de Vurro y ni siquiera lo sabes,, mwhahaha
16:10:15 V de Vurro iJnorante
16:10:34 Arlas666 stas seguro de k tus poderes no tienen efectos secundarios
16:10:40 V de Vurro XD
16:11:04 Arlas666 pareces + tonto d lo normal
16:11:51 Arlas666 yo hace años k instale un sistema de anulacion de ondas cerebrales en utu ropa
16:11:58 V de Vurro chispas
16:12:05 Arlas666 moskis!!!
16:12:08 V de Vurro por eso me dan calambrazos en los pezones=
16:12:09 V de Vurro ?
16:12:15 Arlas666 si
16:12:37 Arlas666 eso y la continua destruccion de tus neuronas
16:12:48 V de Vurro Sólo era una letra de un tango
16:12:59 V de Vurro me da por ahi a veces
16:13:12 V de Vurro conoces a Calamaro?
16:13:15 Arlas666 d k coño ablas?
16:13:28 Arlas666 Calamardo? claro
16:13:30 V de Vurro XDDDD
16:13:48 V de Vurro lo tenia que haber visto venir
16:14:00 Arlas666 jijijij
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[Como le prometí, Doctor Cruz, ya se ha obtenido acceso a todos los textos. Casi todos eran relatos cortos, que podrán ser analizados más exhaustivamente en el futuro, pero a primera vista no parecían nada relevante al caso.
La excepción, por supuesto, es la que le he enviado. El estilo del texto parece del todo distinto al del anterior; el cual había sido, obviamente, objeto de revisiones y retoques antes de alcanzar su forma final. No comprendo si muchos de los fragmentos son parloteos aleatorios o hacen referencia a algo. He de admitir que, de hecho, este texto me provoca la impresión de que una parte del significado real de todo el conjunto se nos está escapando de las manos. Espero su juicio.]
PUTA PUTA PUTA TPUTA PUTA PUTA
Joder no se quien cojones ni que cojones intento engañar si
Joder parece que dewl cadaver de una relacion lo que sale es una MUSA. En forma de un GUSANO que se come la putrefaccion hasta crecer enorme, enorme. Iigual solo es mi caso pero otengo claro que no me gusta nada. No se. Creo. LOLOLOLOLOOLLL
Estoy en un estado de animo que no conocia de antes. Ni contento ni triste sino todo lo contrario. Splunge. Camelot! Camelot! Es una maqueta.
No me parecce normal que lo primero que me entren ganas de hacer es escribir. Pero me la pela. Bastante. Hace tiempo que he pensado que hay un guionista ahi arriba, o ahi fuera(no se si arriba y abajo tiene sentido pa eso, hay muchas dimesiones y tal LOLOL) porque es de pelicula. Mala y de serie Z, pero pelicula. Así que, sabes qué?
-¿Que si se el qué, Otramitaddeltrastornobipolar?
-Que voy a ir y a escribir una cosiuta muy especial. Algo emo pero muy especial
-¿Que cosita, Otramitaddeltrastornobipolar’?
-VOY A DARLE A ESE GUIONISTA UNA PATADA EN LOS HUEVOS PORQUE SI PORQUE SÏ SI SÍ
-Pero no puedeeess tonttoooooooooo
-Oh, sí que puedo. De una manera muy especial.
-Pero no sabes donde esta tonto
-Oh, sí que lo sé.
-¿Cómo? ¿Dónde está?
-Sé que me mira. No sólo él, hay muchos que miran. Se creen omniscientes, pero no saben una cosa
-no me has contestado! Donde?
-Pero lo que no saben es que YO SË QUE ME MIRAN
-¿¿Donde!!?
-Están justo al otro lado de ese muro. ¿Lo ves?
-¿Qué? Cuál, ese muro, el tercero?
-No, no, no, no. El cuarto.
-El cuarto muro?
-EL CUARTO MURO.
Sólo tengo que romperlo. Y entonces nos veremos. Cara a cara.
