Yo fui, digamos, uno de los pioneros en la saga Zelda. Cuando para NES salió ese juego de caja simple y cartucho dorado decidí comprarlo, me atraía la idea de jugar a un juego con un personajillo espadachín! Y vaya si acerté! Que de vueltas a ese mapa impreso que incluía de Hyrule, que de pasadas por cada una de sus pantallas, cuantos empujones a cada estatua para tratar de descubrir nuevos pasadizos, bombas en cada rincón, hacía sonar la flauta en cada hueco, cada lago, cada nueva arma, cada mazmorra, todo era increíble hace ya bastante tiempo. Y ahora Link y yo nos volvimos a encontrar una vez más, y no me pude alegrar más, porque es como cruzarte con un amigo de la infancia sabiendo que los 2 habéis cambiado, pero en esencia seguis siendo los mismos de antes, cuando yo aún era un crío y el aún unos pocos pixeles. Puedo decir sin miedo a equivocarme que Link y yo hemos crecido juntos, él ha ido de plataforma en plataforma evolucionando cada vez más y yo he ido madurando y avanzando en el colegio, instituto, universidad y demás, y siempre estamos en evolución, pero lo bonito es que siempre estamos ahí, Link y yo, yo y Link. Espero volver a cruzarme contigo viejo amigo!!!