Una vez más, las fuentes de Kotaku tenían razón. Sony Interactive Entertainment y Naughty Dog confirman que The Last of Us Part II para PlayStation 4 ha sufrido un retraso en su fecha de lanzamiento y ahora se espera que llegue a las tiendas el 29 de mayo de 2020. Se trata de una demora de tres meses respecto a la fecha original (21 de febrero).
“Lo sé. Solo hace un mes anunciábamos el juego a bombo y platillo, dejamos que los medios lo probaran durante dos horas y presentamos el nuevo tráiler que revelaba, al fin, la fecha de lanzamiento”, escribe Neil Druckmann, director creativo de Naughty Dog. “La respuesta positiva de nuestra comunidad superó cualquier expectativa. Creednos cuando os digo que toda esa energía se puede sentir entre los miembros del equipo. Después de trabajar en un proyecto durante tantos años, resulta muy estimulante ver cómo los fans aprecian tu duro trabajo”.
“Sin embargo, en las últimas semanas, conforme íbamos dando por finalizadas algunas de las secciones del juego, nos dimos cuenta de que simplemente no teníamos el tiempo suficiente para poner el juego al nivel de perfección que se espera de Naughty Dog”, continúa Druckmann. “En este punto, teníamos dos opciones: comprometer la calidad de algunas partes del juego o conseguir más tiempo. Optamos por lo segundo. Con esta nueva fecha de lanzamiento podremos pulir todo al nivel que buscamos sin llegar a presionar demasiado al equipo”.
Para Naughty Dog el retraso de The Last of Us Part II es una noticia agridulce. Por un lado al equipo le consuela saber que la calidad de su trabajo no se verá comprometida, pero se muestran enfadados por no haber podido evitar esta situación. “Ojalá hubiéramos podido prever el nivel de acabado que buscábamos, pero el tamaño y el alcance de este juego nos han superado. Sentimos de verdad haber decepcionado a nuestros fans” dice el director creativo.
Druckmann termina su mensaje a la comunidad pidiendo comprensión a los jugadores, ya que “este tiempo adicional nos permitirá poner a The Last of Us Parte II al nivel de nuestras expectativas colectivas y de nuestro compromiso con los máximos niveles de calidad”.
