No hubo sorpresa. Tras largos meses de filtraciones LG ha desvelado el nuevo G7 ThinQ, un modelo de gama alta destinado a cubrir la parte más elevada de su catálogo y que destaca por sumarse a las últimas tendencias estéticas integrando una pantalla con muesca. Conmiseraciones estéticas a un lado, el G7 ThinQ es un smartphone con algunas prestaciones interesantes que LG espera explotar para capturar ese éxito que por ahora le es esquivo como fabricante de teléfonos.
La pantalla, como decíamos, es uno de esos detalles peculiares. LG regresa con el G7 ThinQ a la tecnología LCD, optando por montar un panel de cristal líquido y 3120 x 1440 píxeles en lugar de otro basado en la tecnología OLED, cuando el fabricante surcoreano parecía apostar por las pantallas orgánicas para su modelos más avanzados. Esta pantalla no solo resulta llamativa por su diseño con "ceja", sino también por alcanzar un brillo máximo de 1.000 nits y compatibilidad con el estándar HDR 10.
Como otros modelos de su segmento, el G7 ThinQ integra un procesador Snapdragon 845 y 5 o 6 GB de RAM en función de la versión. El chipset se integra en un chasis de aluminio con resistencia al agua IP68 y espacio para un botón específico que sirve para lanzar el asistente de voz de Google.
Según LG el G7 ThinQ cumple la especificación MIL-STD 810G, aunque la compañía no proporciona más detalles al respecto. Normalmente este estándar de resistencia militar suele aparecer en teléfonos particularmente resistentes a caídas.
El chasis, precisamente, presenta otro detalle curioso. LG señala que el reparto interno de los componentes permite utilizar la estructura del teléfono como una gran cámara de resonancia para el altavoz, brindando un sonido que debería ser no solo más puro, sino también un 39 % más elevado que el modelo al que sustituye.
Quienes prefieran utilizar auriculares están de enhorabuena: no solo se mantiene el clásico minijack, sino que LG vuelve a utilizar un DAC cuádruple de 32 bits firmado por ESS, así como dos micrófonos de alta calidad. Asimismo, LG señala que el G7 ThinQ es el primer teléfono compatible con DTS:X.
La etiqueta ThinQ le llega por el uso de las cada vez más presentes funciones de inteligencia artificial. La cámara trasera, que posee dos sensores de 16 MP (el segundo de gran angular) se controla mediante un software capaz de reconocer objetos para realizar ajustes en los parámetros de captura de forma automática. LG fue una de las compañías pioneras en este tipo de avances y supuestamente ha refinado su funcionamiento en su nuevo teléfono, incorporando 19 modos de disparo que se seleccionarán en función de la interpretación de la escena realizada por el teléfono.
Como de costumbre, LG no ha facilitado el precio ni la fecha de lanzamiento de su nuevo estandarte telefónico. Todo lo que se sabe es que saldrá a la venta próximamente en Corea del Sur, para llegar más tarde a Europa, el continente americano y el resto de Asia. Como referencia, el saliente LG G6 tuvo un PVP en España de 749 euros.
La pantalla, como decíamos, es uno de esos detalles peculiares. LG regresa con el G7 ThinQ a la tecnología LCD, optando por montar un panel de cristal líquido y 3120 x 1440 píxeles en lugar de otro basado en la tecnología OLED, cuando el fabricante surcoreano parecía apostar por las pantallas orgánicas para su modelos más avanzados. Esta pantalla no solo resulta llamativa por su diseño con "ceja", sino también por alcanzar un brillo máximo de 1.000 nits y compatibilidad con el estándar HDR 10.
Como otros modelos de su segmento, el G7 ThinQ integra un procesador Snapdragon 845 y 5 o 6 GB de RAM en función de la versión. El chipset se integra en un chasis de aluminio con resistencia al agua IP68 y espacio para un botón específico que sirve para lanzar el asistente de voz de Google.
Según LG el G7 ThinQ cumple la especificación MIL-STD 810G, aunque la compañía no proporciona más detalles al respecto. Normalmente este estándar de resistencia militar suele aparecer en teléfonos particularmente resistentes a caídas.
- Pantalla LCD de 6,1 pulgadas 3120 x 1440 con Gorilla Glass 5
- Snapdragon 845
- 4/6 GB de RAM
- 64/128 GB de almacenamiento UFS 2.1 (ampliables)
- Cámara trasera 16 MP (f/1.6, 71°, estabilizada) + 16 MP (f/1.9, 107°)
- Cámara delantera 8 MP (f/1.9, 80º)
- Batería de 3.000 mAh con carga rápida e inalámbrica
- USB-C
- Lector de huellas dactilares
- Resistencia IP68 y MIL-STD 810G
El chasis, precisamente, presenta otro detalle curioso. LG señala que el reparto interno de los componentes permite utilizar la estructura del teléfono como una gran cámara de resonancia para el altavoz, brindando un sonido que debería ser no solo más puro, sino también un 39 % más elevado que el modelo al que sustituye.
Quienes prefieran utilizar auriculares están de enhorabuena: no solo se mantiene el clásico minijack, sino que LG vuelve a utilizar un DAC cuádruple de 32 bits firmado por ESS, así como dos micrófonos de alta calidad. Asimismo, LG señala que el G7 ThinQ es el primer teléfono compatible con DTS:X.
La etiqueta ThinQ le llega por el uso de las cada vez más presentes funciones de inteligencia artificial. La cámara trasera, que posee dos sensores de 16 MP (el segundo de gran angular) se controla mediante un software capaz de reconocer objetos para realizar ajustes en los parámetros de captura de forma automática. LG fue una de las compañías pioneras en este tipo de avances y supuestamente ha refinado su funcionamiento en su nuevo teléfono, incorporando 19 modos de disparo que se seleccionarán en función de la interpretación de la escena realizada por el teléfono.
Como de costumbre, LG no ha facilitado el precio ni la fecha de lanzamiento de su nuevo estandarte telefónico. Todo lo que se sabe es que saldrá a la venta próximamente en Corea del Sur, para llegar más tarde a Europa, el continente americano y el resto de Asia. Como referencia, el saliente LG G6 tuvo un PVP en España de 749 euros.
Cagada de batería se mire por donde se mire.
Desde luego una batería de 3000 es a todas luces ridícula, yo ahora tengo de 4000 y encantado de su duración.
Mi LG G3 fue jubilado por tema batería, duraba un pedo con la pantalla de 2k.
Un verano el procesador petó del calor (pese a no exponerlo al sol), a través de la garantía lo cambiaron y también la batería o eso aseguraron pero seguía descargándose a saco casi sin tocarlo el cabrón.
Se activará durante un femtosegundo reproduciendo contenidos con HDR y el resto será poco más o menos lo mismo. Sería lo lógico.
O a lo mejor se podrá aprovechar mejor bajo el sol, en cuyo caso mejor ir con una batería externa [alien]
Parece ser un mal endémico de los LG G desde el 3 el tema del calor , y como funden las conexiones de los procesadores. Espero que esté solucionado en este.