Después de dos horas la víctima del registro consigue contactar telefónicamente con el abogado David Bravo, quien solicita que se identifiquen todos los presentes y le lean la supuesta orden de registro. Ahí descubren que se encontraban frente a varios trabajadores de la SGAE (procuradora y perito informático), y que la orden solo pedía que el demandado (por vía civil) llevara él mismo al juzgado varias pruebas. Al final, tras una larga discusión, el abogado consigue que los intrusos abandonen el domicilio y dejen allí el hardware que pretendían llevarse; no sin que la secretaria judicial, cómplice del engaño, espetara: No te deberíamos haber dejado llamar al abogado. Gracias a Africa por el aviso.
PD: Todo el que quiera decirle a la SGAE lo que piensa de ella, en lugar de hacerlo en este hilo, puede comunicárelo personalmente el próximo 5 de junio en la concentración que hay programada en la puerta de su sede madrileña.
Actualización: La SGAE responde: Ha habido una tergiversación de los hechos teñidos de mentiras y falsedades.
Pdt: Primen!! :)
saludos
Aunque la verdad que el tipo fue medio "tonto" por decirlo de alguna manera por dejarlos entrar en su casa sin antes leer la orden de registro y asegurarse bien.. pero bueno
juas
Pd. Que Crack David Bravo xDD