Gran Bretaña tiene una ley antiterrorista un tanto estricta y esto ha llevado a que los ISP de dicho país se nieguen a revelar los datos personales de sus clientes, tal y como pide David Blunkett del ministerio de interior.
El secretario del ministerio de interior pide a los proveedores que, si la policía o los agentes de inteligencia quieren ver los datos personales de cualquier cliente, puedan hacerlo sin previa aprobación de un juez.
Tal y como se puede leer en la web de El Mundo, Roger Bingham (miembro de un grupo defensor de las libertades civiles) dijo: "Millones de inocentes usuarios de teléfono, e-mail e Internet tendrán la información sobre sus comunicaciones privadas y sus movimientos almacenados en Internet para su posible uso en el futuro"
Además de ésto, la Asociación de Proveedores de Servicios de Internet (ISPA) dijo que no se cumplan estas exigencias, ya que violan la ley de protección de datos del 1998.
