Durante el año 2010 el MMO World of Warcraft sufrió problemas de acceso debido a una serie de ataques de denegación de servicio distribuido (DDoS, por sus siglas en inglés). El autor de la ofensiva contra los servidores europeos del juego fue Calin Mateias, un ciudadano rumano de 32 años al que ahora un tribunal de Estados Unidos ha sentenciado a un año de cárcel.
Según revela el memorando de la sentencia, Calin Mateias fue acusado formalmente en 2011 y extraditado desde Rumanía a Los Ángeles (Estados Unidos) en noviembre de 2017, momento en el que pasó a estar bajo custodia del estado de California. Durante el juicio Mateias se declaró culpable y acordó pagar 29.987 dólares a Blizzard Entertainment, responsable de World of Warcraft, para cubrir los costes que habían causado sus acciones.
El Departamento de Justicia de Estados Unidos afirma que los ataques contra los servidores europeos de World of Warcraft perpetrados por Mateias entre febrero y septiembre de 2010 provocaron que los jugadores no pudieran acceder al juego con normalidad. La conclusión del juez es que el acusado ejecutó los ataques DDoS para evitar que otros usuarios, con los que acostumbraba a discutir sobre la organización de una banda y la forma de repartirse el botín, no pudieran entrar al MMO.
No es la primera vez que un juego online como World of Warcraft es atacado mediante un DDoS, pero sí es raro ver que el autor de la acción termina siendo extraditado y sentenciado con pena de prisión. Se trata de un caso a una escala menor, pero hace pocos meses se descubrió que un jugador de World of Warcraft enviaba ataques DDoS a sus compañeros de hermandad con el objetivo de que se desconectasen y ocupar su hueco en la banda de Antorus mientras competían por el top mundial.
