Sony ha anunciado hoy una gran reestructuración de la compañía, confirmando la venta de su división de ordenadores Vaio al inversor japonés Japan Industrial Partners y revelando también una escisión de su negocio de televisores que operará como un subsidiario independiente a partir de mediados de 2014. Estos cambios estructurales han obligado a la compañía de Kaz Hirai a recortar sus predicciones para el cierre de su año fiscal que terminará el próximo 31 de marzo con pérdidas netas de 110.000 millones de yenes (802 millones de euros).
La multinacional no ha alterado sin embargo su predicción de ingresos para el mismo año fiscal, ya que las pérdidas netas se deben a los costes de reestructuración de la empresa que han pasado factura al cómputo global. Los cambios en los departamentos provocarán 5.000 despidos para el próximo marzo, de los cuales 1.500 se producirán en Japón.
Los mejores resultados de la compañía provienen de su división de videojuegos que ha experimentado un aumento de ventas del 64,6% gracias al lanzamiento de PlayStation 4. Sony ha reconocido que los beneficios de este departamento (que se sitúan en 18.000 millones de yenes o 131 millones de euros) se han visto afectados negativamente por un descenso en las ventas de PS3 en el último trimestre así como por los costes de fabricación de su sucesora.
Por su parte, la división de móviles y comunicación de Sony (que hasta ahora incluía la venta de PCs) aumentó un 44,8% sus ingresos debido a un "incremento significativo de la venta de unidades de teléfonos inteligentes". El departamento audiovisual aumentó un 24,8% gracias a la venta de televisores LCD, cuyos modelos 4K UHD de alta gama serán el principal objetivo de la nueva escisión de la compañía.
El departamento de entretenimiento, una de las divisiones más cuestionadas de la compañía, aumentó un 7,1% sus ingresos pero sufrió una caída de 4,3 puntos en beneficio operativo. Sony ha destacado el rendimiento de la serie Breaking Bad en servicios de streaming así como la taquilla de Capitán Phillips y Lluvia de Albóndigas 2.
La multinacional no ha alterado sin embargo su predicción de ingresos para el mismo año fiscal, ya que las pérdidas netas se deben a los costes de reestructuración de la empresa que han pasado factura al cómputo global. Los cambios en los departamentos provocarán 5.000 despidos para el próximo marzo, de los cuales 1.500 se producirán en Japón.
Los mejores resultados de la compañía provienen de su división de videojuegos que ha experimentado un aumento de ventas del 64,6% gracias al lanzamiento de PlayStation 4. Sony ha reconocido que los beneficios de este departamento (que se sitúan en 18.000 millones de yenes o 131 millones de euros) se han visto afectados negativamente por un descenso en las ventas de PS3 en el último trimestre así como por los costes de fabricación de su sucesora.
Por su parte, la división de móviles y comunicación de Sony (que hasta ahora incluía la venta de PCs) aumentó un 44,8% sus ingresos debido a un "incremento significativo de la venta de unidades de teléfonos inteligentes". El departamento audiovisual aumentó un 24,8% gracias a la venta de televisores LCD, cuyos modelos 4K UHD de alta gama serán el principal objetivo de la nueva escisión de la compañía.
El departamento de entretenimiento, una de las divisiones más cuestionadas de la compañía, aumentó un 7,1% sus ingresos pero sufrió una caída de 4,3 puntos en beneficio operativo. Sony ha destacado el rendimiento de la serie Breaking Bad en servicios de streaming así como la taquilla de Capitán Phillips y Lluvia de Albóndigas 2.
Pues sí macho,esta gente quieren abarcan tanto que al final falla por algún departamento y se lia parda,como google que cada vez tiene más cosas,dentro de poco trabajaremos para ellos.
Cada dia una cosa diferente..