Después de la caída de la Torre de Akenash, Styx deberá recurrir de nuevo a su ingenio y cuchillo para entrar en Körangar, la supuestamente impenetrable ciudad de los Elfos Oscuros. Pero el objetivo de nuestro amigo goblin va mucho más allá de infiltrarse en Körangar: su meta final es lograr robar el cetro del embajador.
Para dar vida a esta nueva aventura de sigilo, Cyanide Studios ha podido recurrir a un presupuesto mayor que en la primera entrega. Gracias a ello se han embarcado en un proyecto más ambicioso, con una narrativa más compleja, más libertad de movimiento y mecánicas de sigilo y asesinato perfeccionadas. También se ha cambiado la solución gráfica apostando por Unreal Engine 4.
Styx: Shards of Darkness es un juego más abierto y menos lineal que el original, permitiendo completar las misiones mediante diferentes rutas y tácticas. Los variados estilos de juego que brinda Styx vienen acompañados de un mayor arsenal de herramientas y habilidades, incluyendo la posibilidad de teletransportarse. Mediante un nuevo sistema de crafteo también se abrirá la posibilidad de crear trampas y otros dispositivos con los componentes que se roben.
Los jugadores que reserven Styx: Shards of Darkness recibirán el conjunto Akenash, que incluye un traje y una daga.
