Sin hacer mucho ruido y en medio de un calendario rebosante. Así es como ha llegado a las tiendas Cocoon, una aventura de rompecabezas desarrollada por Geometric Interactive, un estudio independiente danés cofundado por el diseñador Jeppe Carlsen y el programador Jakob Schmid, antiguos empleados de Playdead (Limbo e Inside). Cocoon ronda la nota media de 90 sobre 100 y desde hoy se encuentra disponible en PS4, PS5, Xbox One, Xbox Series, Nintendo Switch, PC (Steam) y Game Pass bajo el sello de Annapurna Interactive.
En Cocoon el protagonista es una criatura parecida a una cigarra que al poco de nacer se ve empujada a un mundo árido y en gran parte desolado. En este planeta alienígena hay enemigos a los que se debe hacer frente en combates que además de ser atractivos prometen poner a prueba la rapidez mental de los jugadores. Pero Cocoon es ante todo un juego de exploración en un mundo abierto donde solo existen una serie dispositivos biomecánicos dejados atrás por una civilización antigua. La criatura debe usar estas estructuras para avanzar y la forma de hacerlo es sencilla, como mínimo a primera vista.
Cocoon solo usa cinco botones, uno para cada uno de los puntos cardinales y uno para interactuar. Este último es el que permite insertar un orbe en las estructuras. Una tarea aparentemente fácil pero que esconde una gran complejidad. “Cada orbe tiene una habilidad que se puede desbloquear, convirtiendo así el orbe en una herramienta única para que la utilices en otros mundos”, explica Geometric Interactive. Estas habilidades se deben usar para descubrir caminos y objetos ocultos, disparar proyectiles para activar interruptores y más. Resolver los rompecabezas de un mundo ayudará avanzar en otros.
Aquellos que han probado Cocoon coinciden en decir que se trata de un juego de rompecabezas desafiante pero no abrumador. Esto se debe a que el título evita la frustración aislando discretamente los elementos que no son necesarios para el puzle actual. De forma sutil, Cocoon informa a los jugadores de que están exactamente donde necesitan estar para progresar, reduciendo así las variables a un número manejable. El título de Geometric Interactive consigue todo esto sin llevar a los jugadores de la mano, sino que despierta su curiosidad para poner a prueba las leyes de su universo.
