El editor Devolver Digital se ha asociado con el equipo de desarrollo japonés Skeleton Crew Studio (Olija) para anunciar Forestrike, un juego de kung-fu táctico con mecánica roguelike que estará disponible en 2025 para Nintendo Switch y PC a través de Steam. Para ir abriendo boca tenemos un primer tráiler con gameplay, mientras que los asistentes al BitSummit, un evento centrado en los juegos indie que se celebra esta semana en Japón, podrán probar una demo.
En Forestrike los jugadores lucharán en combates en los que siempre serán superados en número. Para sobreponerse a este hándicap, el juego cuenta con una mecánica llamada presciencia, que se describe como una técnica meditativa que permite percibir mentalmente los combates una y otra vez hasta encontrar una secuencia de movimientos que permita superar las adversidades. La presciencia es una forma de experimentar las consecuencias antes de luchar de verdad, y ganar o morir en el intento. Ganar no siempre significa que el héroe saldrá ileso de cada encuentro, pero cuando más lejos llegue, más fuerte se hará.
Gracias a su bucle roguelike, Forestrike genera runs y encuentros cada vez, lo que obliga a los jugadores a adaptarse e improvisar para avanzar. Perder en combate obliga a empezar todo de nuevo, pero el progreso es permanente. A medida que se avanza, el héroe mejora y sus movimientos se pueden personalizar adoptando técnicas de uno de los cinco maestros de kung-fu, cada uno con sus propias características. La idea es que cada batalla sea como un rompecabezas que hay que resolver usando la mente además de los puños.
Forestrike sigue el estilo artístico de Olija y la narrativa basada en la fantasía. En esta ocasión nos encontramos en un mundo pixel art que sigue la historia de Yu, un artista marcial que se embarca en un viaje hasta la capital del país para liberar al emperador de la influencia de un malvado almirante.
En Forestrike los jugadores lucharán en combates en los que siempre serán superados en número. Para sobreponerse a este hándicap, el juego cuenta con una mecánica llamada presciencia, que se describe como una técnica meditativa que permite percibir mentalmente los combates una y otra vez hasta encontrar una secuencia de movimientos que permita superar las adversidades. La presciencia es una forma de experimentar las consecuencias antes de luchar de verdad, y ganar o morir en el intento. Ganar no siempre significa que el héroe saldrá ileso de cada encuentro, pero cuando más lejos llegue, más fuerte se hará.
Gracias a su bucle roguelike, Forestrike genera runs y encuentros cada vez, lo que obliga a los jugadores a adaptarse e improvisar para avanzar. Perder en combate obliga a empezar todo de nuevo, pero el progreso es permanente. A medida que se avanza, el héroe mejora y sus movimientos se pueden personalizar adoptando técnicas de uno de los cinco maestros de kung-fu, cada uno con sus propias características. La idea es que cada batalla sea como un rompecabezas que hay que resolver usando la mente además de los puños.
Forestrike sigue el estilo artístico de Olija y la narrativa basada en la fantasía. En esta ocasión nos encontramos en un mundo pixel art que sigue la historia de Yu, un artista marcial que se embarca en un viaje hasta la capital del país para liberar al emperador de la influencia de un malvado almirante.
Mola.
No recuerdo mucho el Celeste, pero más bien me parece que el sistema de progresión es el de Hades.
Que vas mejorando armas y habilidades, en una sucesión de niveles, que tienes que empezar de nuevo al morir. (Vamos, como muchos otros, que tampoco es que inventaran la rueda)
Realmente no sé cómo es el Hades, mi comparación con Celeste es porque es un constante ensayo y error inmediato, que tan pronto cómo mueres sigue la acción, y todo consiste en volver a empezar siguiendo un mismo patrón que vas aprendiendo progresivamente. En Celeste es a dónde saltar, aquí es cómo atacar.
XD