Hardspace: Shipbreaker pone a los jugadores en la piel de un profesional del desarme de naves espaciales que tiene una inmensa deuda con la megacorporación Lynx. Una de las claves en este trabajo es tener las herramientas actualizadas e intentar hacerse con los derechos de desarme de naves cada vez más grandes y valiosas. Hay diferentes tipos de naves, desde pequeños navíos de transporte hasta grandes cargueros y cada uno de ellos propone un desafío diferente en un entorno de gravedad cero.
Los jugadores deben usar la creatividad para dominar el entorno, que además de reactivo puede ser despiadado. Hay que tener en cuenta que la megacorporación Lynx no tiene porque ser un aliado, así que será mejor depositar la confianza en los compañeros de trabajo. Además de una campaña para un jugador donde el objetivo final es liquidar una deuda de 999.999.999 créditos, Hardspace: Shipbreaker ofrece desafíos competitivos donde jugadores de todo el mundo pueden medir sus habilidades en tablas de clasificación.
Los que busquen algo más relajado o prefieran mejorar su técnica, encontrarán un modo donde se puede desarmar cualquier nave sin limitación alguna. Independientemente del contenido al que se juegue, el simulador de física siempre estará activo.
El 24 de mayo Hardspace: Shipbreaker abandonará el acceso anticipado de Steam con una actualización que incluirá el último acto de la campaña para ofrecer una conclusión a la historia que se puso en marcha en los dos primeros capítulos. También incorporará mejoras en la progresión, economía, rendimiento y estabilidad, así como logros y cromos de Steam.
Tráiler de Hardspace: Shipbreaker - The Atlas Tugged, la última actualización que ha recibido el juego.
