Según los primeros detalles ofrecidos por Yasuda, el remake de Lollipop Chainsaw tiene como objetivo entregar la misma oferta que el juego original, pero con dos cambios importantes. Por un lado, Dragami Games quiere aprovechar la potencia del hardware de nueva generación, así que el remake presentará “un enfoque más realista de los gráficos”. Por otro, existen problemas con los permisos musicales y la nueva versión solo podrá tener unos “pocos temas con licencia”, mientras que el resto de la banda sonora será nueva.
Uno de los motivos para devolver a la vida a Lollipop Chainsaw es el hecho de que a día de hoy es imposible encontrar el juego en las tiendas digitales. “Desgraciadamente, varios factores han hecho que los fans ya no puedan jugar fácilmente a Lollipop Chainsaw [...]”, lamenta Yasuda.
Además de Yoshimi Yasuda, que repetirá como productor, el remake de Lollipop Chainsaw cuenta con gran parte del equipo original. Esto se debe a que el pasado mayo Kadokawa Games, desarrollador de Lollipop Chainsaw, vendió parte de su negocio y la licencia del juego a Dragami Games. Además, Yasuda ha confirmado que se han puesto en contacto con Warner Bros. Games para sacar adelante el remake y han recibido su apoyo. Se desconoce si este soporte implica la distribución del título o si simplemente es un beneplácito.
Lollipop Chainsaw es un juego de acción hack and slash surgido de la colaboración entre Goichi Suda y el director de cine James Gunn. Su campaña sigue a Juliet Starling, una animadora de 18 años que después de ser salvada por su novio Nick Carlyle del mordisco de un zombi le corta la cabeza para evitar que se transforme. Por algún motivo la cabeza de Nick sigue viva, así que se la coloca en su cinturón. Ella y una motosierra se enfrentarán a una horda de no muertos resucitada por Swan, un alumno ninguneado cuyo amor por Juliet no es correspondido.
