Como decimos, Blackberry se ha hecho un nombre en el mercado móvil (sobre todo en el sector empresarial) en los últimos años con la promesa de una potente herramienta de seguridad en su mensajería. Una promesa que ahora podría verse seriamente dañada tras el reportaje de Vice.
En el mismo encontramos un despiece de documentos sobre la crónica de un asesinato que tuvo lugar en el año 2010. Una investigación donde estuvo inmerso el servicio de policía de Montreal y que recientemente se ha hecho pública, revelando que la policía de Canadá utilizó una clave de cifrado maestra de la compañía de móviles para interceptar más de un millón de mensajes enviados mediante el servicio de Blackberry Messenger entre los años 2010 y 2012.
Los informes presentado por la policía no dan a conocer la manera en la que se accedió a las comunicaciones cifradas de la compañía y el fiscal se ha negado a aclarar nada al respecto. Por su parte, Blackberry también se ha negado a comentar el asunto.
En cualquier caso, la revelación implica que la policía canadiense ha tenido la capacidad de espiar las conversaciones privadas de los ciudadanos desde hace años, todo ello sin su consentimiento, de la misma forma que anteriormente y tras el caso Snowden sabemos que otras agencias gubernamentales como la NSA lo han hecho en Estados Unidos.
No está claro de qué forma Blackberry participó en esta violación de la privacidad, o si la propia policía está todavía en posesión de esa “llave maestra” que permite interceptar las comunicaciones a través de Messenger de Blackberry. Lo que sí parece claro tras esta noticia es que las comunicaciones y los datos de los usuarios no están a salvo con prácticamente ningún fabricante de hardware.