Acabo de leer que el político homosexual que ha sufrido una agresión homófoba en un establecimiento de kebab los ha justificado de la siguiente manera:
Pero parece ser que los nervios por la muchedumbre, el estar abarrotado y el cansancio, hizo mella en los trabajadores, que comenzaron a burlarse de mí. Una mujer que allí trabajaba, ya de cierta edad, no una niña, comenzó a sacarme burla, ella sabrá por qué. Le recriminé la actitud y como siguió (mientras me servían el kebab) pedí una hoja de reclamaciones.