Lo prometido es deuda, y AMD ha querido saldarla con creces. Tal y como avanzó hace varias semanas, el fabricante de procesadores ha aprovechado la jornada de hoy para desvelar su arquitectura Zen 3 y la nueva gama de procesadores de sobremesa
Ryzen 5000; unos chips que no solo son descritos como la mejor opción posible para
gaming, sino que oficialmente brindan más rendimiento que ningún otro del mercado tanto en modo
multicore como con un solo núcleo.
Los nuevos Ryzen 5000 (la
nomenclatura 4000 se queda en exclusiva para portátiles) están basados en Zen 3, una arquitectura que refina el proceso de producción mediante chiplets para simplificar costes y sacar un mejor partido al nodo de 7 nm mejorado de TSMC. No hay 5 nm como señalaban algunas voces que claramente habían perdido el oremus. En su lugar, Zen 3 utiliza la misma litografía ya puesta en práctica con los
Ryzen 3000XT.
Aunque el proceso ya es por tanto conocido, la distribución de los elementos técnicos del procesador (desde el reparto de los núcleos al diseño de la memoria caché) es totalmente nueva. Con Zen 3 AMD promete un incremento bruto de instrucciones por ciclo de reloj del 19 %, lo que situaría la mejora de rendimiento de sus nuevos Ryzen en la parte más alta de lo que cabría esperar en un salto generacional.
Según AMD, Zen 3 brinda un acceso a la memoria L3 muchísimo más veloz para reducir la latencia durante las sesiones de juego, que también se ve optimizada mediante el nuevo diseño de núcleos. Aunque AMD no lo ha dicho directamente, da la impresión de que algunas de las mejoras vistas en Zen 3 han sido adaptadas del trabajo realizado durante el desarrollo de PlayStation 5 y Xbox Series X (o viceversa).
La gama de procesadores inicial estará compuesta por cuatro chips. Los Ryzen 9 equiparán 64 MB de caché L3, mientras que los Ryzen 5 y 7 disponen de 32 MB. Como se puede apreciar en la tabla, el nuevo
boost es más que generoso.
Aunque los precios en euros aún no son oficiales, las tarifas para Estados Unidos reflejan un sensible incremento en los precios con respecto al
lanzamiento de Ryzen 3000. Unos 50 dólares, para ser concretos. Sobre el papel siguen siendo más competitivos que sus homólogos de Intel, pero la subida está ahí.
Todos los procesadores Ryzen 5000 serán compatibles con las placas ya existentes basadas en los chipsets 400 y 500. Los propietarios de una placa Series 400 deberán esperar a que el parche esté disponible hacia enero de 2021, mientras que aquellos que tengan una Series 500 podrán pinchar los nuevos procesadores tan pronto como salgan a la venta, asumiendo que ya hayan actualizado su BIOS.
Cabe suponer que AMD proporcionará un mayor número de
benchmarks y comparativas en el momento de su lanzamiento, cuando detallará Zen 3 en mayor profundidad. Mientras tanto, Intel no ha perdido el tiempo. Ayer mismo quiso restar protagonismo a los anuncios de AMD señalando que Rocket Lake, su próxima generación de procesadores de sobremesa, llegará en el primer trimestre de 2021, y también con un marcado énfasis
gaming.
Todas las personas que adquieran un procesador Ryzen de nueva generación podrán acogerse a la campaña Equipped to Win, que incluye una copia de Far Cry 6 Standard Edition. Esta promoción, que durará hasta el 31 de diciembre, también se extiende a aquellos consumidores que quieran aprovechar las ofertas y opten por un Ryzen 9 3950X, Ryzen 9 3900XT o AMD Ryzen 7 3800XT.
Y además, un pequeño anticipo de "Big Navi"Por otro lado, Lisa Su, máxima responsable de AMD, ha querido dar un pequeño anticipo de la nueva familia de tarjetas gráficas Radeon RX 6000. Cariñosamente apodadas "Big Navi", harán por fin énfasis en los juegos a 4K. De hecho, durante la presentación se ha mostrado un brevísimo fragmento de Borderlands 3 funcionando a aproximadamente 60 FPS con el máximo nivel de detalle.
El debut de las nuevas Radeon RX 6000 tendrá lugar el día 28 de octubre en un evento separado. Será entonces cuando conoceremos en detalle los cambios realizados en la arquitectura gráfica de AMD y cómo se traducen en prestaciones, pero los datos iniciales apuntan a unas tarjetas que, al menos en su versión más potente, querrían acercarse a la ahora mismo
muy escasa GeForce RTX 3080.
Fuente: AMD