La conferencia de AMD en el CES estaba siendo entre aburrida y reiterativa. De los 60 minutos programados para el evento, la mitad del tiempo se lo ha pasado recordando el próximo lanzamiento de Zen 2, hablando de los chips para portátiles que ya anunció
hace varios días y reafirmando su compromiso con Microsoft para seguir trabajando "en el futuro". Resulta que la compañía dirigida por Lisa Su se estaba guardando lo mejor para el final: el debut de la nueva
Radeon VII.
Disponible a partir del 7 de febrero, tendrá un precio de 699 dólares en Estados Unidos.
Radeon VII se basa en la segunda generación de Vega (no tiene nada que ver por tanto con la futura arquitectura Navi), y más concretamente parece un derivado las profesionales
Radeon Instinct MI50 y MI60. Se trata de la primera tarjeta para juegos fabricada usando un proceso de 7 nm. Cuenta con 60
compute units a hasta 1,8 GHz, 3.840 procesadores
stream y, más notablemente, la enorme cantidad de 16 GB de memoria HBM2, con un ancho de banda de 1 TB/s.
AMD señala una mejora de rendimiento del 25 % a igual consumo, con mejoras de entre el 35 % y el 42 % en relación a las prestaciones de la Radeon RX Vega 64. Comparándola con los productos de Nvidia, el fabricante asegura que es competitiva o incluso ligeramente superior a la GeForce RTX 2080.
La primera demo en el escenario ha tenido a Dante por protagonista. Devil May Cry 5 se ha ejecutado a 4K con una tasa de fotogramas de entre 70 y algo más de 100 FPS.
Resulta llamativo el hecho de que AMD se ha dejado bastantes detalles en el tintero. Esto tal vez tenga algo que ver con el hecho de que si nos fijamos en el número de núcleos, básicamente es la misma tarjeta que la Radeon Instinct MI50 presentada hace unos meses para expertos en 3D e IA, pero ligeramente más rápida. Como tal, cabe esperar un TDP próximo a los 300 vatios.
Aunque competitivos en relación a los números de Nvidia, estos datos no son particularmente brillantes si se considera que las tarjetas Radeon VII han sido las primeras en bajar su nodo a 7 nm. Esto se debe al hecho de que AMD todavía sigue utilizando la arquitectura Vega. Considerando los catálogos de ambas empresas, esto hace pensar que no habrá grandes saltos de rendimiento en el mercado de las tarjetas gráficas a corto o medio plazo.
Según ha anunciado AMD, los primeros análisis estarán disponibles dentro de muy poco. Que no es algo sorprendente si se considera que el lanzamiento de la tarjeta está prácticamente a la vuelta de la esquina. Será entonces cuando podremos comprobar su rendimiento real.
Fuente: AMD