AMD ha anunciado oficialmente el lanzamiento de su tarjeta gráfica de consumo más potente hasta la fecha. La
Radeon VII ya está aquí, convirtiéndose en la primera GPU para juegos fabricada usando un proceso de 7 nm. En su punto de mira, las nuevas GeForce RTX 2080. A diferencia de las tarjetas de Nvidia, la Radeon VII no incorpora soporte para
tecnologías punteras como el trazado de rayos.
La Radeon VII, recordemos, es básicamente una
Radeon Instinct MI50, originalmente diseñada para labores de inteligencia artificial y rénder profesional, pero adaptada para juegos con mínimos retoques. Como tal posee 60
compute units y 3.840 procesadores
stream, así como 16 GB de rapidísima (y nada económica) memoria HMB2 con un ancho de banda de 1 TB/s.
Durante su conferencia en el CES, AMD la definió como una apta rival para la RTX 2080 de Nvidia, superándola incluso en algunos aspectos. Los
primeros análisis, que ya están fuera, indican sin embargo que su rendimiento es en general ligeramente inferior salvo con algunos juegos como Far Cry 5 y Battlefield 1, donde muestra registros más positivos. De hecho, en varias pruebas queda por debajo de la GTX 1080Ti.
Según
AnandTech, comparándola con la Radeon RX Vega 64 su rendimiento a 1440p es un 24 % superior. Este porcentaje sube hasta el 32 % usando un monitor 4K.
Los datos iniciales de ruido y temperatura no son positivos en relación a la gama RTX. Posiblemente se deba al hecho de que, aunque fabricada a 7 nm, no deja de utilizar una GPU basada en la arquitectura Vega, y además AMD ha querido aumentar la velocidad de reloj para sacarle el máximo rendimiento.
La Radeon VII tiene un PVP de 750 euros en España. No es una tarifa muy ventajosa si se considera que las RTX 2080 más asequibles
rondan los 720 euros, pero AMD ha querido endulzarlo ofreciendo tres juegos totalmente gratis con su compra: Resident Evil 2, Devil May Cry 5 y The Division 2.
Fuente: AMD