El pasado fin de semana, la antigua actriz de doblaje de
Bayonetta pidió a los fans que boicotearan el nuevo juego, afirmando que sólo le ofrecieron 4.000 dólares por trabajar en él. Sus vídeos en Twitter se hicieron virales y avivaron el debate sobre los salarios de los actores de doblaje. Pero la historia completa es mucho más complicada...
Platinum ofreció a Hellena Taylor entre
3.000 y 4.000 dólares por sesión por al menos 5 sesiones, según dos personas familiarizadas con el acuerdo y la documentación vista por Bloomberg. En respuesta, dijeron las personas, Taylor pidió una tarifa de seis cifras y costes adicionales. Las negociaciones fracasaron.
Taylor niega esta versión. En un correo electrónico enviado a Bloomberg, calificó esa versión de los hechos de "absoluta mentira" y dijo que Platinum está "intentando salvar su culo y el juego".
Los vídeos de Taylor han recibido más de 9,5 millones de visitas en Twitter y han provocado un aluvión de llamamientos de fans y expertos para boicotear
Bayonetta 3. Pero las cuentas y las pruebas revisadas por Bloomberg dejan claro que esos vídeos no eran toda la historia.
Los vídeos de Taylor también provocaron un aluvión de críticas y acoso en Twitter hacia los desarrolladores de Platinum y la nueva actriz de
Bayonetta, Jennifer Hale, que emitió un comunicado diciendo que no podía hacer comentarios y posteriormente retuiteó un hilo revelador:
Es poco probable que la historia completa consiga tanta tracción o tantos globos oculares como los vídeos originales de Twitter, lo que (en mi opinión) plantea algunas cuestiones interesantes sobre las súplicas a la emoción y cómo se difunde la información en la era de los medios sociales.