* La alcaldesa de Madrid dice que no puede evitar la huelga de barrenderos.
Ana Botella, en la rueda de prensa de hoy. La alcaldesa de Madrid no comparte la sensación que ha empezado a extenderse por la ciudad de que las calles están cada vez más sucias; especialmente, desde que el pasado mes de agosto se adjudicara a varias empresas privadas el "contrato integral de gestión de servicio" con un presupuesto notablemente más bajo.
"Nos hemos acostumbrado a un nivel de limpieza muy alto que nos estamos esforzando en mantener", subraya Ana Botella, que destaca que "la gente que viene de fuera percibe" esta circunstancia. "Aquí se recoge la basura todos los días, mientras que en Londres es sólo una vez a la semana", ha indicado a modo de ejemplo.
En cualquier caso, la regidora madrileña se ha declarado "activa" en cuestiones de suciedad: "Si voy por la calle y veo algo que no está bien llamo al delegado [Diego Sanjuanbenito en este caso] para que lo arregle".
Respecto a la huelga indefinida de barrenderos convocada para el 28 de octubre, Botella sigue manteniendo la postura de achacarla a un conflicto laboral entre las empresas adjudicatarias y los sindicatos. Según ha destacado, en el caso de que llegue a producirse, el Ayuntamiento sólo podrá "aprobar unos servicios mínimos y hacer que se cumplan".
Ley de Reforma de las Administraciones Locales
Tras la Junta de Gobierno del Consistorio, Botella también ha indicado que pedirá al ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, "un cambio en la Ley de Capitalidad" para que, con la Reforma de las Administraciones Locales, Madrid no pierda las competencias del Samur, Protección Civil y los servicios sociales en general.
La alcaldesa considera que la capital tiene "unas características especiales, como Barcelona", que la facultan para hacer este tipo de reclamaciones y no cree que la petición por parte de su Ayuntamiento de dicha excepcionalidad pueda considerarse como una