Mi hermano va todos los años a la Campus (yo no porque soy un ser básicamente antisocial), pero para mí cada vez está más claro que su valor como escaparate político y publicitario -como ya ha dicho alguien- es lo que está primando sobre algo tan básico como el tratar mínimamente bien a la gente que ha pagado por asistir a ella. Cosa que es contraria al planteamiento inicial de este tipo de eventos, pero en fin, a mí me parece que aquí en Valencia casi todo funciona así...
La mejor prueba de ello es que anuncian a bombo y platillo la conferencia de Neil Armstrong... ¡y eso sí que lo hacen en la Ciutat de les Arts i les Ciències! Vamos, yo me sentiría insultado (como de hecho se siente mi hermano), porque es evidente que están maltratando a los asistentes desde el momento en que hacen algo así en la Ciutat. Es decir: para hacer el paripé con los medios y el astronauta y todo eso, la Ciutat; para amontonar a los asistentes, la Fira.
Es obvio que para ellos está claro qué lugar es mejor, como lo está para la mayoría de los propios asistentes.