Heavy Rain: impresionante título que me mantuvo atado al sofá durante todo el tiempo que tarde en pasármelo, haciéndome disfrutar como hacia mucho tiempo que no lo conseguía
Assassin's Creed: la gran sorpresa de la pasada generación, un soplo de aire fresco para el género de aventuras, y un esfuerzo de recreación arquitectónica insuperable. Una de mis sagas favoritas de la historia, que tristemente ha entrado en barrena
Red Dead Redemption: para mi, Red Dead revólver no es el inicio de la saga, sino un experimento, siendo el RDR de PS360 el verdadero juego que quisieron hacer desde el principio, y una auténtica obra maestra dentro del género de los sandbox.
Binary Domain: una pasada de TPS que me atrapo desde el minuto uno, y que no me decepciono en ningún momento, aportando una experiencia muy satisfactoria en cuanto a jugabilidad y trama. El tapado de 2012.
Uncharted: saga que empezó sin muchos alardes, pero que se ha convertido en una de las mejores sagas de la historia, sin más.
The last of Us: EL JUEGO de la pasada generación.
Asura's Wrath: la apuesta más arriesgada y fascinante que he visto en años, y la mejor forma de representar lo que se siente estando dentro de un Shonen
Journey, Flower y Flow: o como hacer que lo más básico se vuelva mágico
Ni no Kuni: jugar a una película de Ghibli fue siempre uno de mis sueños y, gracias a Level 5, se hizo realidad
Braid: mi único juego digital de la past gen, y una auténtica pasada de juego.