Bueno, pues en la playa me he leído casi tres libros:
Matar a un ruiseñor, de Harper Lee. Es un libro bonito que sucede en los años 30 en un pueblo ficticio de Alabama. Es de un juicio, de prejuicios raciales y de un misterioso hikkikomori
. Recomendado. Me daba la impresión de que estaba viendo Sonrisas y lágrimas pero aún así tiene su encanto.
Dune. Alguno me matará, pero me ha parecido un libro bastante aburrido. Me explico: el universo, el planeta, las criaturas, las facciones y los personajes están bien, la ambientación y todo eso, pero la manera de escribir de Frank Herbert me aburre. A cada acción del protagonista, Paul Atreides, aparece el comentario de rigor de la madre...
"-Hmmm, tengo ganas de comerme un petisui- dijo Paul abriendo la nevera y mirando ávidamente un petisui de fresa y nata.
Vaya, parece que mi hijo, está imitando a su padre en la manera de comer ese petisui, gracias a su severo entrenamiento de comer petisuis instruido por la anciana Bene Gesserit de Caladan -pensó Jessica, mientras se mordía las uñas al contemplar a su hijo comerse el petisui".
Lo he exagerado mucho... pero es que el libro tiene más momentos aburridos que memorables. No sé, yo no lo recomiendo, aunque como todo, tiene partes chulas, pero es que es una pena que sea tan blando en general.
Ahora me estoy leyendo Crimen y Castigo, de Dostoievski, y me está encantando.