Pues me desahogo por aqui un poquito:
Segunda vez que me examino del coche, para nada nervioso hasta cierto punto en que tanto el examinador como el dueño de la autoescuela (no me ha acompañado ni mi profesor) comienzan a hablar entre ellos sobre pisos en la playa, moviles, grandes superficies y para colmo mencionando ubicaciones como "conforme entras en X ciudad, a la derecha" vamos, una fiestas de la distracción al conductor. 10 Minutos de conducción libre bastante bien pero los problemas comienzan cuando me da indicaciones y se entrecruzan con la conversación que mantienen ambos. Ordenes contradictorias + Profesor despistado = Acelero para pasar un semáforo y no pegar el frenazo con la sorpresa de que mi profesor si que pisa el freno yendo distraido.
Mi indignación es brutal. No vuelvo a esa autoescuela en mi vida.