¡Yo desprecinto! He desprecintado en los últimos años juegos como Marvel vs Capcom 2 PAL de Dreamcast o Sakura Taisen 3.
Es una gozada estrenar un juego de hace casi 20 años y tenerlo nuevo inmaculado en tus manos, es como un viaje directo al pasado, me encanta.
Como si pudieses volver al pasado, ir a la tienda y coger el juego de la estantería para comprarlo.
Lo tienes, lo observas con el precinto, lees la contraportada y...
¡BUM! De golpe y porrazo conectas con aquella experiencia que solías vivir al abrir X juego de X plataforma querida.
Creo que en estos casos el olor juega un papel muy importante y es lo que te devuelve de una ostia 20 años atrás, a cuando abrías los juegos de la consola concreta que fuese, ese conjunto de olores (manual, plástico, etc) está ahí contenido y cuando lo desprecintas y lo abres el cerebro despierta estímulos olvidados que yacían en lo más profundo del subconsciente, pero que al volver a experimentarse se vuelven de golpe y porrazo totalmente familiares y reconocibles, van directos a esos recuerdos, es como un rayo.
Ese olor es como un shortcut directo para el cerebro a zonas a las que ya hacía tiempo que no accedía y cuyos caminos a ellas ya se habían difuminado.
Esto pasa en otros momentos de la vida con todo tipo de aromas/fragancias/olores del pasado, oler algo que solías experimentar hace mucho tiempo te puede evocar a recuerdos/personas/lugares de forma instántanea.
Una vez desprecintado y abierto; ver el disco cristalino, el manual, los panfletos, leer el manual y admirarlo todo.
Y luego, ponerlo en la consola, maravillarte, jugarlo y gozarlo cosa mala.
Y disfrutarlos mientras se pueda hasta que dejen de funcionar o lo que sea, el día que eso pase a emular (y flashear y grabar, etc) sea dicho
Y que nos quiten lo bailao.