Joder, y yo en Suiza, un verano así en Barcelona puede ser una jodida bendición, pero aquí es que ha habido un día en total digno de hacer una barbacoa, en abril, y desde entonces que casi vamos a peor, la semana pasada tuve que volver a casa en tranvía porque con sólo un jersey me estaba quedando periquito.
En fin, habrá que al menos volver pa san Juan, que la coca el cava y los cohetes no van a gastarse solos.