Buenas, antes que nada decir que esto es un clon para preservar mi identidad y la poca dignidad que me queda...
Es muy pero que muy patetico pero necesito contarlo... ahí vá!
Pongamonos en antecedentes... hace unos meses corté con la novia, y bueno al cabo de unos dias iba muy caliente y en un arrebato va y me compro por internet una de esas vaginas en lata. Al cabo de unos dias me llega a casa y nada todo perfecto. Después, no se donde, leí que si ponias el relleno un rato en agua caliente la vagina quedaba calentita y bien apetitosa para darle al tema. Lo probé y una maravilla, lo mejor para descargar y no depender de ninguna tia. Pues nada, de vez en cuando, cuando había apretón pues realizaba mi ritual y listos.
Bien, ahora viene el tema... hace un par de días me vino la urgencia bien de golpe, y no tenia ganas de calentar agua, así que meti el relleno en un bol con agua y pal microondas un ratito, la verdad, no recuerdo cuanto rato lo metí. Al sacarla metí el relleno en la latita y metí el cimbrel... DIOS! QUE PUTO DOLOR!! El relleno se habia medio fundido por dentro y al meterla me la quemo y se me quedo pegado!!! AGH!! No la pude sacar de ahí de ninguna manera!!! Saqué la lata y ví el percal, tenia el relleno pegadito a mi pene... Intenté tirar pero me dolia un montón. Así que fuí como pude a urgencias... No os podeis ni imaginar el paquete que marcaba con eso ahí... Pues nada, llego y le tengo que decir al de la ventanilla lo que me pasa para que me derive a donde toca... Que puta vergüenza, joder, ni os lo imaginais. Suerte que era de noche y no habia ni dios en la sala de espera.
- Que le pasa?
- Pueeeees... esto... es que se me ha quedado una cosa pegada y no me la puedo despegar.
- Ajá, en que parte del cuerpo?
- Eeeestoooo... pueeeeeeeeeees... en el pene...
El tio abre los ojos de par en par, pero no suelta ni una palabra. Al cabo de unos segundos que parecieron minutos:
- Sientese ahí, ahora le llamamos.
Bien, ahora empieza lo peor. Me llaman, entro en donde me indican y me encuentro cara a cara con un doctor.
- Bien, podria enseñarme la zona afectada?
Me bajo los pantalones, me saco los calzoncillos y le muestro la "zona". El tio pone una cara que lo flipas al ver el percal. Le cuento lo sucedido y el tio aguanta como un campeon, ni se rie ni nada, eso si, las caras que pone... Ufff, es que me lo imagino y lo entiendo perfectamente... Y yo no veas, no sabia que era peor, si el puto dolor y escozor que tenia en el manubrio o la puta vergüenza que estaba pasando. Cuando acabo de explicarselo, el tio empieza a examinar el tema, mira, remira y se va hacia unos cajones y saca... un bisturí!! Yo me cagué, pensé, este tio me la corta, cree que no soy digno de tener descendencia y va a cortar por lo sano!! Pero no, el tio cortó la vagina. Fué cortando los cachitos que sobraban hasta dejar solo lo enganchao... Pues visto así no parecia tan grave la cosa, al final "solo" se enganchó por dos partes, en la piel de enmedio a lado y lado, eran como dos redondeles, de 1 cm mas o menos. Ahí me alivié un poco, ya me parecia ver la luz al final del tunel... Entonces el doctor me dice.
-Bien, ahora viene la parte complicada, tenemos que despegar estos trozos... Te va a doler, pero cuanto mas tardemos peor va a ser.
Me cagué aún más que cuando salió con el bisturí, pero asentí, que remedio. El tio ni corto ni perezoso se pone manos a la obra, con unas pinzas empieza a tirar del trozo de plastico... DIOS QUE PUTO DOLOR!! Vi las estrellas, no pude mirar lo que hacia, pero me dolia un montón!!! No se cuanto tiempo estubo para quitarmelo, pero supongo que no más de un minuto, a mi me parecieron eones. Me aviso que ya habia acabado de quitarmelo, con el daño que me habia hecho yo creía que me habia emputado medio cimbrel por lo menos. Pero no, al final tenia las dos ronchas a lado y lado del pene bien rojas y con la piel quemada y la piel de alrededor bien escocida y medio quemada... Me salió barata la cosa. Pues nada, a partir de ahí me puso un par de potingues para las heridas y las quemadas y ale, pa casa con recetas de los potingues y el manubrio que parecia una momia. De verdad, el doctor fué todo un profesional, le agradezco mucho lo que hizo por mi chiquitina.
Y nada, ahora aquí estoy, en casita y con mi arma fuera de combate por un tiempo. Lo peor de todo es que no puedo tener erecciones, no veas como tira la piel, dios, que dolor.
Aquí termina mi aventura, es una cosa tan surrealista y patetica que no contaré en la vida a nadie, pero necesitaba hacerlo, así que creo que aquí y con la privacidad que me proporciona este usuario es el mejor sitio.
Recordad: Si en el microondas lo meteis, no os lo pincheis. Avisados estais.
Saludos.