Es posible que muchos usuarios se hayan preguntado alguna vez cuál es el beneficio que obtiene una marca por cada
smartphone de gama alta vendido. Dicho de otra forma, ¿cuál es el precio real que cuesta hacer un
smartphone como el nuevo iPhone 7 en comparación con su precio final de salida al mercado? La firma de investigación IHS Markit ha desglosado el
coste exacto de manufactura.
La primera sorpresa, o quizá no tanto, es que el iPhone 7, aun sin el conector para auriculares, sigue siendo más caro de fabricar que el 6S. La factura total de los materiales, o el coste de los componentes del iPhone 7, suma una cantidad de 219 dólares según el estudio de IHS. La compañía estima además que la construcción de cada iPhone 7 le cuesta a Apple 5 dólares más. Por tanto, su coste de fabricación total sería de 224 dólares (201 euros al cambio actual).
Hay que decir que los precios son en base al modelo de 32 GB del iPhone 7 y que los resultados son aún preliminares a falta de una revisión final, aunque es de esperar que no varíen en exceso. Siendo así, los casi 225 dólares pueden parecen algo caros en comparación con el coste de fabricación del 6S calculado el año pasado, cuya estimación era de 187 dólares. Según explica la firma:
La factura total de los costes de materiales para el iPhone 7 está más en línea con lo que hemos visto en los desmontajes de los teléfonos tope gama recientes de su principal competidor, Samsung, cuyos costes son más altos que en los análisis de iPhone anteriores. El resto de cosas son similares, Apple aún tiene más margen que Samsung, pero los costes de materiales son más altos que en el pasado.
Es el momento de pasar a compararlo con su precio de salida al mercado. El iPhone 7 de 32 GB tiene un precio de 769 euros (libre) en Europa. Es decir, que Apple tendría un margen de hasta 568 euros por cada unidad vendida. Esto con el modelo más barato, pero IHS espera llevar a cabo también el mismo estudio con las versiones más grandes y con el modelo iPhone 7 Plus.
Como decimos antes, se trata de un análisis preliminar que puede variar algo cuando se complete la revisión a finales de año, en un examen donde se evaluará cada componente con mayor detalle. También hay que aclarar que no se han incluido otros costes externos como pueden ser las áreas de investigación y desarrollo y el marketing, por lo que es evidente qur el beneficio final sea inferior al estimado únicamente por los costes de fabricación.
Fuente: Fortune