Apunto una cosa rápido y sigo con el tema: si puede denunciar cualquiera, y luego son los funcionarios los encargados de resolver, se produciría un colapso administrativo brutal. Sería peor el remedio que la enfermedad, gasto ingente de recursos monetarios, personales, etc. Vaya chapuza.
Aparte de lo que se comentó anteriormente, esto a mi me apesta a Dictadura del Terror, como la de Robespierre, adaptada a nuestros tiempos.
"El Terror aparece como un arma de doble filo, que al mismo tiempo segó la vida de muchos inocentes, pero también acabó con numerosos complots de especuladores y reaccionarios en París y otras partes de Francia, con lo que, para algunos, el Terror se habría justificado en parte".
Menos mal que de la historia se aprende. O no.