Si tuviéseis una ligera, remota, ínfima idea de lo que le pasa a vuestro organismo tras comer semejante mierda, dejaríais de hacerlo.
La alimentación es la gran asignatura pendiente de nuestra sociedad.
La diabetes, obesidad, inflamación y permeabilidad intestinal, aumento de alergias y otras enfermedades autoinmunes, descenso de los niveles de testosterona en hombres, aumento de los niveles de cortisol, trastornos depresivos, degradación de la flora intestinal y un sinnúmero de padecimientos, están directamente derivados de que nos alimentamos como el puto culo.